La sospechas por las polémicas contrataciones que el Municipio de Junín realizó en favor de la empresa Mingrino Construcciones y que se conociera que son investigadas por al Justicia, llevaron al propio Intendente Pablo Petrecca y la diputada provincial de Cambiemos, Laura Richini, a salir públicamente a minimizar el vínculo familiar entre el jefe comunal con los dueños de la constructora.
En ese marco, la concejal por el Frente Renovador, Carolina Echeverría, manifestó que «la empresa Mingrino desembarcó en la ciudad de Junín luego de que Cambiemos asumirá la conducción política del municipio, y fue favorecida con contrataciones directas millonarias».
«A partir de una investigacion periodística nos enteramos del vínculo cercano entre la familia del Intendente y la empresa constructora, y esto genera sospecha, mientras que los vecinos exigen cuentas claras. Y estos hechos no hacen más dejar en evidencia las falencias que la gestión Petrecca tiene en materia de transparencia», explicó Echeverría.
Además la concejal massista, dijo que «hace más de un año y medio presentamos desde nuestro bloque de concejales un proyecto de ordenanza para transparentar el manejo de las cuentas municipales y el oficialismo no nos habilitó ni siquiera la discusión en comisión. La es concejal Lía Castratovich cajoneó el expediente. Y, a partir de enero de este año, nos han sacado la clave de acceso a los sistemas contables del municipio que nos permitía controlar los movimientos financieros».
En este marco, la concejal del Frente Renovador Natalia Donati, sostuvo que «permanentemente nos dicen que nos quedemos tranquilos y que confiemos en ellos, como si esto se tratara de un juego de niños, pero son los fondos públicos los que están en juego».
«En el mes de septiembre del 2017, haciendo uso y abuso de la emergencia vial, la empresa Mingrino fue beneficiada por una compra directa de 8,9 millones de pesos, para realizar las paradas de los futuros colectivos. Sería bueno que alguien del gobierno de Petrecca nos explique que urgencia había en el otorgamiento de ese contrato millonario. Además en muchos de los contratos que ganó Mingrino era, llamativamente, la única empresa oferente, en semejanza a metodología que permitía a Lázaro Báez ganar licitaciones en la época del kirchnerismo», dijo Donati.
También la concejal, dijo que «en el caso de la licitación para la construcción del nuevo Centro de Monitoreo, la obra fue adjudicada a Mingrino luego de que el Municipio descalificara a otra empresa que había pasado un presupuesto de un $ 1.500.000 más barato».
Por último, Donati señaló que «si el Intendente considera que ejercer nuestro rol de concejales y contralor de los fondos públicos del municipio significa poner palos en la rueda, le aclaramos que está equivocado, porque esa es nuestra función. Los concejales somos veedores y controladores de la gestión y a su vez la voz de los vecinos en el recinto, es por ello que cumpliremos con nuestra tarea y realizaremos las consultas y denuncias que creamos necesarias, porque eso es lo que nos están pidiendo los vecinos».
