María Eugenia Vidal realizó el lanzamiento formal de su candidatura como gobernadora de la provincia de Buenos Aires en la cancha de básquet del Club Atlético Sarmiento de Junín, acompañada del vicegobernador Daniel Salvador, el primer candidato a diputado nacional por Juntos por el Cambio Cristian Ritondo y el intendente Pablo Petrecca, además de otros dirigentes de la coalición.
En su discurso, reiteró su idea de que las próximas elecciones serán las más importantes desde la vuelta de la democracia, en 1983. «Esta no es una elección más para nuestro país. Mucho más para nuestra provincia. En esta elección vamos a elegir, no un partido ni una persona, sino la oportunidad de seguir cambiando, de seguir logrando cosas que parecían imposibles, sin echarle la culpa a nadie; o volver al pasado, que es el abandono, la mentira, las falsas promesas, el sometimiento. En la provincia de Buenos Aires ese pasado duró 28 años y sabemos lo que nos dejó».
«Somos un equipo con valores, que cree que gobernar es hacer y estar»
Vidal destacó que durante su gestión las obras dejaron de ser una promesa y pasaron a ser una realidad que se puede ver. Resaltó que esto no fue otra cosa que el cumplimiento del compromiso que asumieron cuando asumieron en 2015.
«Este es un buen momento para mostrar esa provincia que hicimos posible, para contar quiénes somos y por qué nos queremos quedar. Nos representan los hechos, pero también nos representan nuestros valores. Nos representa quiénes somos. Somos esfuerzo, somos compromiso, somos trabajo, somos diálogo, somos esperanza. También somos errores y la capacidad de aprender de ellos para corregir«.
«Creemos en nuestra dignidad. Todo este equipo tiene una sola cara. Y te mira a los ojos»
Con vehemencia, volvió a la carga contra el kirchnerismo y destacó que aunque hoy se haya rodeado de caras nuevas siguen estando los mismos que habían echo explotar una bomba en la provincia.
«¿Cómo le vas a dar a cada bonaerense lo que necesita si nunca estuviste en su pueblo? Si solamente fuiste a las ciudades grandes seis meses antes. Cuatro veces recorrí los 135 municipios de esta provincia. Dieciocho años hace que vivo acá. Y hace tres años les dije a los bonaerenses que no iba a ser presidenta, que los iba a elegir a ellos y no los iba a utilizar como un trampolín de votos. Acá estoy, cumpliendo esa promesa. Para nosotros, el valor de una palabra es como el valor de una firma. Esos son nuestros valores y los vamos a defender».
