Paulina Gramaglia: «Mientras sea posible, pienso en estudiar y jugar al fútbol»

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Paulina Gramaglia la rompe toda con Talleres en la Liga Cordobesa, al punto que no han sido pocos los equipos de la Primera División de AFA que ya la pusieron bajo la lupa. También es capitana de la Selección Argentina Sub-17 y se ilusiona con conseguir en noviembre el boleto al que sería el primer Mundial de su carrera.

Sin embargo, su realidad es muy diferente a la de un futbolista que cumpla con sus mismos requisitos en el masculino, al que posiblemente con esa proyección ya estarían ofreciéndole un contrato que resolvería no solo sus problemas económicos por un par de décadas, cuanto menos, sino también los de su familia.

Lejos de lamentarse por esas desigualdades abismales que todavía son parte de nuestro fútbol argentina, y a la vez que lucha todos los días por ganar espacio y visibilidad, la cordobesa ya es consciente que, mientras pueda, hará convivir el deporte que ama con los estudios.

«Mientras sea posible, y creo que es posible siempre, pienso en estudiar y jugar al fútbol. Por ahí un futbolista hombre que hace inferiores, está por firmar su primer contrato en Primera, lo deja de lado. Porque se maneja otro dinero. Si realmente tenés mucho éxito, después podés vivir sin haber estudiado nada. En el fútbol femenino esa no es la realidad. Entonces, tenés que estar preparándote, pensando qué vas a hacer durante y después de la carrera de futbolista», expresó en diálogo con el programa Por los Pibes, que se emite por Radio Provincia.

Igual de lúcida con las ideas que con la pelota, Paulina Gramaglia se refirió a la importancia que tendría para la formación de jugadoras en Argentina que se naturalicen las divisiones inferiores mixtas a temprana edad; experiencia que ella tuvo la suerte de vivir.

«Tuve la oportunidad de empezar de chica, en un club con varones. Yo iba a la primaria y jugaba siempre en los recreos con mis amigos. Llegó el momento en el que le dije a mis papás que quería jugar al fútbol y me llevaron a esta escuelita, donde estaban muchos de esos compañeros de la primaria, por cuatro o cinco años. Ya a los 12, en el verano me puse a buscar un club al que poder ir a jugar con chicas. Ahí me llegó la noticia de que iba a haber una prueba en Talleres. Fui y acá estoy, desde hace cinco años en el club», relató.

Y agregó: «Creo que haber entrenado con varones de chica me ayudó. Soy partidaria del fútbol mixto en edades formativas. Es una buena forma de mezclar y te da una muy buena base. Es una oportunidad de formación que muchas jugadoras no tienen en el país».

Sobre sus experiencias con la Selección Argentina, a la que llegó a través de una visoría que se realizó en Río Tercerno, no olvida la primera vez que hizo concentración en el predio que la AFA tiene en Ezeiza. «Bajamos en la terminal, nos fue a buscar Diego Guacci (el DT) y dijo que íbamos a parar en el Complejo N2, que es donde para la mayor masculina. Pensábamos en esos pasillos caminó Messi. Fue impresionante, todo de primer nivel».

Es que la delantera cordobesa -¿y quién no?- siempre admiró el fútbol del crack argentino del Barcelona. Claro que si tiene que encontrar una referencia en el femenino, también la tiene: «Actualmente, como centro delantera, Vivianne Miedema es una referente que tengo muy presente«, dijo sobre la delantera holandesa que brilla en el Arsenal inglés.

Por Juani Portiglia

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