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Pensamientos Negativos: ¿Qué hacer con ellos?, por Isabel Muñoz

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Según estudios científicos, se  considera que tenemos unos 60.000 pensamientos diarios y la mayoría son negativos, repetitivos y del pasado, claro esta que funcionan de manera inconsciente.

El tema es que no podemos no pensar, es parte de la naturaleza humana y lo que nos diferencia de los animales , pero, son los pensamientos intrusivos involuntarios que conquistan nuestra mente apoderandose de nuestro bienestar mental y emocional y deteriorandom nuestra calidad de vida,este simple acto que corresponde al ejercicio intelectual de proyectar ideas e imágenes suelen ser de un impacto nocivo dependendiendo del enfoque favorable o no y de la construcciòn del “mapa mental” que vayamos construyendo y que , de una forma u otra determina la manera de percibir, manifestar, y conllevar la vida y responder al entorno que  nos rodea

Reconocer que los pensamientos negativos sabotean nuestra  vida y desencadenan emociones dañinas (angustia, culpa, rabia, vergüenza, tristeza, decepción). producen síntomas físicos (dolor de cabeza, taquicardias, cansancio, tensión muscular, insomnio) favorecen conductas inadecuadas (evitación, bloqueo, inseguridad, indecisión) es un modo de lograr comenzar a procesar una tècnica que se llama interrupción del pensamiento que pude ayudar  a cambiar esa forma de pensar tòxica y nos ayude a sentirnos mejor , acabando con las limitaciones en las areas significativas de la vida

El periodista John Paul Flintoff, autor del libro “Cómo cambiar el mundo” ha llegado a la conclusión de que existen pensamientos negativos  principales, que todos sufrimos en un momento dado, y las ha compartido:

  • Pensar sólo en blanco y negro  y no dejar lugar a los grises, es el tipo de pensamiento dicotómico  rígido e inflexible, sin matices entre el blanco y el negro. … entre lo bueno y lo malo, extremista, por ejemplo  :

                   “Estás conmigo o contra mí.”                                  “Todo o nada.”

  • Leer la mente de otras personas  o “pensar por el otro” determinarnos por lo  que piensan otras personas de nosotros o nuestros actos, cuando en realidad es imposible que sepamos lo que piensan como :

                  “creen que soy aburrido”  “piensan que soy un torpe” “no le caigo bien”

  • Autoculparse percibir que todo lo malo que ocurre a nuestro alrededor es nuestra responsabilidada o de nuestros actos o comportamiento , es una emociòn toxica y un pensamiento altamente negativo e inmovilizante

                           “Parece enfadada, seguro que es por mi culpa””no debi haber dicho nada…”

  • Ser catastrofista , una especie de complejo del adivino Si pensamos con frecuencia que algo va a asalir mal, es obvio que puede salir mal, una especie de profesia autocumplida, y no es el destino o mala suerte sino la mala predisposicion y negatividad que invade nuestros sentidos afectando nuestra actitud

“¿Y si presento mis ideas y todos se burlan de mí?” “ ¿Y si al cruzar la avenida no me doy cuenta de que viene un auto a toda velocidad?”

Lo ideal es replantearnos la rumiaciòn de los pensamientos negativos, no quedarnos “enganchados”,  y ponernos en movimiento en la busqueda de pensamientos positivos, ayudandonos con un paseo, escuchar una melodìa que nos relaje, hacer algo que nos de placer. El hacer ejercicio aumenta los niveles de serotonina y reduce el cortisol, es decir, aumenta la felicidad y reduce la ansiedad, una buena caminata puede ser la soluciòn

Imagina  un pez que goza nadando  por mar abierto, y todos los días nada a diferentes lugares que disfruta  con compañía o  consigo mismo…más  existen pescadores que constantemente arrojan ganchos y trampas para pescar, de pronto, uno de estos ganchos,  le jala,  y le lastima, pero sobretodo  lo alejan del lugar donde quería estar o de donde estaba en ese momento. Es una metáfora de ti,  los ganchos una simbolización de todos los pensamientos, preocupaciones y emociones a los que decides engancharte y que te alejan de lo que es importante para ti.

Si quedamos “enganchados” con los pensamientos negativos  pueden llegar a inhibir nuestras capacidades y desmejorar  nuestra calidad de vida. Abre tu postura ante la vida y sonríe, concéntrate en lo bueno que existe a tu alrededor. Hay ocasiones que hacen aparecer sensaciones y pensamientos negativos, evitarlos es una manera de “esquivar” el anzuelo, y dar espacio al bienestar y a la salud mental y emocional, liberarnos de esos “ganchos” nocivos comienza con cambiar nuestra manera de pensar

Los pensamientos negativos son efímeros y eventuales, no tienen poder real propio, pero son capaces de hacer mucho daño si  se les da lugar para crecer. Debemos tener en cuenta que un pensamiento no tiene más poder que el que uno le da.

«Nunca le des una pulgada a un pensamiento negativo tomará una milla».  Matshona Dhliwayo.

Isabel Muñoz

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