Bebelo ReynosoCopa LibertadoresLiga de Quito

Boca le ganó con altura a Liga de Quito

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Tanto se habló de altura, de aire, de resistencia y hasta de Viagra que muchos se olvidaron de ponerse a pensar qué rival era Liga de Quito. Para cuartos de final de Copa Libertadores, un rival chiquitito.

Si tocaba subir mil metros más, la cosa no iba a cambiar demasiado, porque ya con analizar plantillas queda en evidencia que Boca le saca varias cabezas al equipo ecuatoriano.

Pero ahí andaba dando vueltas la derrota con Almagro y, por las dudas, había que dejar plantada la excusa. No hizo falta. En apenas 11 minutos, el Xeneize ya se había puesto en ventaja con gol de Wanchope Ábila, que recibió la asistencia medida de Mac Allister, gambeteó a Gabbarini y le dio a la pelota el toque final hacia la red.

Mauro Zárate encendió las alarmas cuando se fue lesionado a los 21, pero el que entró Bebelo Reynoso, también le iba a pasar el trapo al equipo local que, para colmo, jugó con uno menos desde el final del primer tiempo por la expulsión de Orejuela.

Ya lo había dicho Daniele De Rossi, que hoy se quedó en el banco de suplentes: «No sé en qué posición juega, pero Bebelo es un fenómeno». Y Reynoso le regaló al italiano y a todo Boca un gol de tiro libre que justificó esa definición y empezó a liquidar la serie.

Sobre el final del partido, a los que ya no le respondieron las piernas fue a los locales. Porque ánimo mata cansancio. Y tras una definición imperfecta de Wanchope Ábila, a diez minutos del final, Caicedo se llevó la pelota por delante para cederle al Xeneize el 3-0. La próxima semana, en La Bombonera, habrá que hacer un trámite. Nada más.

Por Juani Portiglia – @JIPortiglia

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