Mientras el plantel de Boca permanece aislado tras su arribo desde Brasil, y en medio del cruce entre la dirigencia «xeneize» y el presidente de la Liga Profesional de Fútbol, Marcelo Tinelli; el Gobierno podría habilitar un «corredor sanitario» para que no se suspenda el partido ante Banfield y que puedan jugar los futbolistas que están en cuarentena.
Luego del escándalo en el Mineirao, con una batalla campal entre jugadores y dirigentes boquenses contra auxiliares y policías de Belo Horizonte, el Ministerio de Salud determinó que se había roto la burbuja y que el plantel tenía que hacer aislamiento obligatorio, algo que ya le había ocurrido a River tras la pretemporada.
En este marco, y de cara el choque del sábado ante Banfield y del martes frente a San Lorenzo, Boca tendría que presentar un equipo inédito, repleto de juveniles, lo que generó reclamos, pedidos de postergación (que no prosperaron) y la que parece ser la solución: la implementación de un «corredor sanitario», algo que sería oficializado en las próximas horas.
Qué es un corredor sanitario
La medida dispone que Boca se someterá a las pruebas PCR para descartar la presencia de casos de coronavirus, y si dan negativo, podrá salir del hotel donde está alojado solo para ir a entrenarse en el predio Pedro Pompilio, y luego para dirigirse al Florencio Sola para enfrentar a Banfield.
Una vez que concluya el encuentro, tendrá que regresar y permanecer en la concentración hasta el martes que reciba al «Ciclón», repitiendo el mismo protocolo.