Esta semana, Boca, River y Racing juegan partidos clave en sus grupos de Copa Libertadores. El objetivo es llegar a los octavos de final y seguir en carrera con la esperanza de sumar una nueva estrella a sus vitrinas. Son tres de los clubes más ganadores de fútbol argentino. Pero hace 110 años la historia era diferente. Los tres coincidían en el mismo torneo y con los mismos sueños: crecer y llegar a Primera.
Hay una serie española que se llama El Ministerio del Tiempo. Allí, existe un lugar secreto en el que a través de diferentes puertas se puede regresar a un año determinado. Los agentes intervienen en un hecho histórico para que la historia no cambie. Si se tuviera la oportunidad de atravesar la puerta de 1908 y viajar al Buenos Aires de principios de siglo XX, no sería necesario modificar el curso histórico de ninguno de los tres. Pero sería maravilloso observar aquellos tiempos de construcciones, de canchas peladas, de humildes tribunas de madera, de escasos seguidores, de camisetas descoloridas, de brusquedades, de sueños de grandeza.
Una de las fotos más viejas que se conocen de River: el campeón de 1908.
El 3 de mayo de 1908, este jueves se cumplen 110 años, se disputaba la segunda fecha del torneo de Primera Liga, como se llamaba a la segunda categoría de la Argentine Football Association (AFA), la Liga oficial, que estaba afiliada a la inglesa Football Association (FA) pero todavía no a la FIFA. Ese día debutó Boca en el fútbol oficial, mientras que River y Racing ya estaban desde 1905. Los tres jugaban en zonas diferentes. Independiente, que ese año también inició su participación oficial, se anotó en Tercera Liga. Y San Lorenzo hacía apenas un mes que se había fundado.
Los ascensos y descensos en el fútbol argentino comenzaron en 1907. Ese año ganó Nacional el torneo de Segunda, el equipo de los empleados de la tienda Gath & Chaves pero nunca llegó a jugar en Primera. En esa época, los nuevos equipos aún podían elegir en que categoría jugar, a excepción de Primera. Boca, a principios de 1908, decidió inscribir su equipo principal en la segunda categoría. Le tocó la sección C y debutó ante el equipo B de Belgrano Athletic (el principal jugaba en Primera y ese año fue campeón) en la cancha (hoy de rugby) que aún tiene en Virrey del Pino y Superí. Boca ganó 3-1, con dos goles de Rafael Pratts y uno de Juan Manuel Eloiso. Se impuso en el grupo con comodidad y fue uno de los animadores del torneo.
River, que estaba en la Sección B, había comenzado su participación una semana antes, el 26 de abril, al golear 5-2 a Continental B. El entonces darsenero ganó el grupo y se clasificó a semifinales. Por su parte, Racing integraba la Sección A y recién jugó su primer encuentro el 7 de junio: perdió 2-0 con Quilmes. El equipo de Avellaneda igualó el grupo con Estudiantil Porteño A y accedió a semifinales tras un desempate.
Los tres llegaron a instancias finales. River, en cancha de Racing y antes unos 1.500 espectadores, goleó a Ferro 5-1 el 8 de noviembre y se clasificó para la final. La otra se disputó recién el 6 de diciembre en Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires. Racing, con un gol de Pablo Frers, venció a Boca 1-0.
La final la jugaron River y Racing. Hubo un primer partido, el 13 de diciembre, en GEBA. River ganaba 2-1 y se suspendió por incidentes. El Consejo de la AFA decidió anular el encuentro tras el informe de árbitro Rodrigo Campbell. La nueva definición se jugó el domingo 27 de diciembre, también en GEBA. Allí, River goleó 7-0 y logró el ascenso a Primera División, categoría en la que debutó el 2 de mayo de 1909 (este miércoles se cumplen 109 años) con una goleada por 5-0 a Argentino de Quilmes.