Parece que las palabras de Gabriel Heinze, entrenador de Vélez, calaron hondo en Ricardo Centurión, flamante refuerzo del club de Liniers, que se pone a punto como nunca esperando su debut en el Fortín.
«Yo me voy a hacer responsable. Todo lo que pueda llegar a pasar externo con Centurión, seré yo: me tendré que ir ó me tendré que quedar”, había dicho el Gringo en conferencia cuando le preguntaron por los problemas extrafutbolísticos que abundaron en la carrera del jugador surgido en Racing. Y Centu parece haber cambiado el chip.
Este miércoles bien entrada la noche, cerca de la madrugada, compartió con sus seguidores una imagen en el ascensor de su casa después de entrenar.
«El esfuerzo vale la pena», escribió el volante de 26 años junto a la imagen en la que se lo ve sin remera.
Involucrado más que nunca en el proyecto de Vélez (que está a dos puntos de la cima en la Superliga), el mediocampista continúa entrenando en su hogar pese a la intensidad que suelen tener las prácticas diarias a cargo de Heinze. Y los hinchas se ilusionan…