Grande, ¿se nace o se hace? Una discusión histórica en cada mesa de bar, en cada reunión de futboleros. Ayer, hoy y siempre. Sin embargo, la condición de los cinco equipos considerados tradicionalmente grandes tiene fecha de nacimiento: 4 de agosto de 1937. El viernes pasado se cumplieron 80 años. ¿Qué sucedió en la asamblea realizada en la sede de la calle Viamonte 1372/76 aquel miércoles 4 de agosto? Algo que ya se venía tramando desde hacía tiempo. Los clubes más convocantes, más poderosos, querían tener el poder real. Y para ello necesitaban sumar más votos que el resto de los otros equipos. La AFA en 1937 tenía 49 clubes afiliados, 18 de Primera, 17 de Segunda y 14 de Tercera de Ascenso. En las asambleas, cada club de Primera tenía un voto, mientras que la Segunda categoría, un solo representante. Es decir, 19 asambleístas votaban. Ya existía el Consejo Federal, que estaba afiliado a la AFA, pero aún no participaba de las decisiones. El voto proporcional establecía que un voto valía tres o dos de acuerdo a ciertas condiciones. Y en esa primera instancia, hubo siete clubes privilegiados: Boca, River, Independiente, Racing y San Lorenzo, con tres votos. Huracán y Estudiantes, con dos. El resto, uno.
Se lee en boletín 286 del 4 de agosto de 1937. “Artículo 13. Modificación total – Aprobada por 17 votos. Cada club de Primera categoría, mientras permanezca en ella, tendrá en las asambleas y en el Consejo Directivo un número de votos proporcional a su importancia, según se establece a continuación: a) Un voto el que no esté comprendido en alguna de los siguientes incisos; b) dos votos el que cuente con más de 10.000 y menos de 15.000 socios o el que, no teniendo esa cantidad de asociados, haya sido campeón de primera división y tenga en esa división una antigüedad no menor a 20 años consecutivos; c) tres votos el que, teniendo más de 15.000 socios y más de 20 años de actuación consecutiva en primera división, haya sido campeón de primera división en dos o más temporadas”.
La Memoria y Balance de la AFA de 1937 dejó constancia del voto proporcional.
El modificado estatuto de AFA establecía, además, que “El representante de segunda categoría tendrá un voto en las Asambleas y en el Consejo Directivo”, y que “ningún club de primera categoría podrá tener más de tres votos, sea cual fuere su importancia”. También se agregó un nuevo artículo, el 92, que establecía que “cada dos años, en febrero en los años impares, la Asamblea prescripta en el Art. 30 del Estatuto, deberá rever las condiciones de los clubes cada de primera categoría para aumentarles, disminuirles o confirmarles la cantidad de votos que tengan asignado”.
Si bien existen algunos registros anteriores en los medios que referían la condición de grandes a estos cinco clubes, a partir de entonces el periodismo se encargó de marcar esa diferencia con el resto. Y hasta de criticar esa “hegemonía muy peligrosa”, como tituló la revista La Cancha en su edición del 10 de agosto de 1937. Explicaba entonces: “Los cinco clubes principales tienen ahora de hecho el gobierno del fútbol. Tres votos cada uno representan cinco. De los trece restantes diez cuentan con uno sólo y tres con dos (finalmente fueron solo dos). El representante de los clubes de segunda, uno. Les es muy fácil entonces conseguir la mayoría de votos para cualquier proyecto que les convenga particularmente”. La Cancha deja constancia que a fines de 1936 los clubes grandes intentaron imponer el voto proporcional por la situación patrimonial, algo que fue negado por la Inspección de Personería Jurídica, que luego aceptó la cuestión de los asociados. También decía que si bien “los clubes grandes apelaban a esa superioridad de socios en relación con los demás clubs, pero entre ellos también existe, y bien dispar por cierto; pero no se aplica el mismo criterio”. El cambio estatutario fue aprobado por el Poder Ejecutivo Nacional el 18 de octubre de 1937 (decreto 116.757). Hay que recordar que el presidente de la AFA era el dirigente de Boca Eduardo Sánchez Terrero, a su vez yerno de Agustín Justo, presidente de la Nación en la denominada década infame.
En otra referencia, se lee en el diario El Mundo el 1 de septiembre de 1937: “Desde algún tiempo, los cinco clubes grandes reunidos en bloque….» En tanto, en agosto de 1941 apareció el libro “Historia de los 5 grandes del fútbol argentino”, escrito por un grupo de periodistas de manera anónima. En sus primeras páginas se dirigen “a la afición argentina”. Y dicen: “La historia de los 5 grandes del fútbol argentino, escrita sin obedecer a una intención de lucro, cumple el sano propósito de llevar a los millares de aficionados, datos que convenzan por la gravitación de su imparcial exactitud, que les libre de equivocadas apreciaciones, constituyendo un testimonio serio de inmediata referencia para llevar a feliz término las acaloradas discusiones que, frecuentemente, se suscitan indisponiendo las buenas relaciones entre quienes, muchas veces, sostienen de buena fe un error porque carecen de una fuente de información veraz”.
Publicidad de la marca de cigarrillos Imparciales «Los siete grandes». Es posterior a 1941, cuando Huracán pasó a tener tres votos.
Cada dos años se modificaba el voto proporcional. Huracán presentó el pedido recién en 1941 y fue aprobado en la asamblea del 5 de marzo. A partir de allí pasó a tercer tres votos. Posteriormente, la marca de cigarrillos Imparciales patentó la frase «los siete grandes», sumando a Huracán, que ya tenía tres votos, junto con los otros cinco y el atado de cigarrillos.
En los años posteriores no hubo modificaciones, hasta que en 1949 la asamblea del 25 de marzo aprobó los pedidos de Gimnasia y Esgrima La Plata y Chacarita, que pasaron a tener dos votos. “En virtud de lo establecido por los artículos 10 y 48 de este Estatuto, los clubes Boca, Huracán, Independiente, Racing, River y San Lorenzo tienen tres votos cada uno; los clubes Chacarita, Estudiantes y Gimnasia, dos; y los demás representantes, uno cada uno”, dice el boletín de AFA 1.443. En 1951, lo solicitaron Newell’s, Platense y Lanús. Se armó una comisión especial para estudiar el caso, y el 28 de marzo fueron rechazados por 15 votos contra 12. En 1953 insistieron Newell’s, Lanús, y se sumó Vélez. El 21 de abril, la comisión de AFA rechazó el pedido por 20 votos contra 9.
El boletín de AFA de 1953 en el que se rechaza el pedido de Newells, Platense y Lanús de sumar dos votos.
El voto proporcional quedó sin efecto a partir del 12 de enero de 1955. En la asamblea Extraordinaria se votó la modificación del artículo 10: “Los representantes de los clubes de primera categoría y los que representen al conjunto de los clubes de Primera B, segunda y tercera y a las ligas afiliadas, tendrán, en la Asamblea, un voto cada uno”. El fin de una época privilegiada que duró 18 años.
