Si se trata de simplificar la cuestión, Daniela Rodríguez juega de Banini. Tiene apenas 12 años, pero no hay equipo en España, por más grande que sea, que no sepa de su nombre y su talento. A Levante llegó hace menos de un año, después de dejarla chiquitita en el CD Campello. Y hace un mes renovó su vínculo con el club hasta 2022.
2019 fue un año a pura celebración para ella, porque ganó todos los títulos en juego: Copa Oro de Alicante, Copa Oro Autonómica y Liga, siendo además pichichi de la competición con ¡63 goles! Además, fue una de las 14 elegidas para jugar el Campeonato de España Sub-12 con la Selección Valenciana. ¿Cómo no iba a llamar entonces la atención del equipo Granota?
A los seis años comenzó a jugar futsal y los primeros recuerdos que se le vienen a la cabeza cuando piensa en el inicio de su relación con la pelota son aquellos partidos en que era la única nena, pero en los que dijo nunca haberse sentido incómoda. También se le viene a la memoria la primera vez que jugó en césped, un torneo en la Vall d’Uxo. «El fútbol para mi es todo, donde están muchas de mis alegrías. Mi felicidad. Muchos de mis sueños futuros tienen que ver con el fútbol», le dijo la joyita valenciana a Junín24 Fútbol Femenino.
🔥⚽La pegada de Daniela Rodríguez, heredera de @EstefiBanini_10 en el @LUDfemenino 💙❤https://t.co/OnonOkuZve pic.twitter.com/z5NAk3BEaX
— Juani Portiglia (@JIPortiglia) July 20, 2020
Detrás de la pisada soñada, del remate envidiable y de una visión para filtrar pases que cualquiera tardaría el doble de su edad para ejecutar; hay una familia que siempre acompañó esas ganas de jugar a la pelota y que intenta preservarla ahora que todo comenzó a ir demasiado rápido para ella. «Para mi mujer y para mí, nuestra prioridad absoluta es que nuestras hijas sean felices. Nunca les hemos impuesto qué deporte practicar. Tanto con su llamado a la Selección Valenciana, como en su llegada al Levante, siempre le hemos dicho lo mismo: que disfrute sin presión, que vendrá lo que tenga que venir pero lo importante es disfrutar del camino», expresó papá Oscar, igual de orgulloso por las habilidades de su hija en cancha que por el hecho de que sea Matrícula de Honor en todas las materias del colegio.
Y agregó: «Quien conoce a Daniela dice que lo que más le llama la atención es su personalidad humilde, respetuosa, que huye de los conflictos y nunca saca pecho. Pero más allá de eso, yo intento que no esté muy al tanto de temas de contratos, representantes… Son cosas de adultos y no tiene que condicionar su visión del deporte. Te reconozco que yo he pasado momentos en que sentía que todo iba tan rápido que no me daba tiempo de asimilarlo. Solo espero que ella siga disfrutando tanto como a lo largo de estos tres años».
Con papá haciéndose cargo del papeleo, del que ella ya tiene suficiente con la escuela, no le queda más que disfrutar del juego que ama: «El apoyo de la familia es importante, porque te hace sentir segura. Yo he tenido la suerte de sentirlo siempre, pero sé de niñas que no lo han tenido tan fácil y me da pena que algunas acabaran dejando de hacer lo que les hacía feliz», remarcó Daniela R20, como ya se hecho nombre en las redes sociales.
Este año lo empezó jugando en el Alevin A del Levante en liga masculina y con el femenino ganó un torneo en Cardona, anotando dos goles en el triunfo 3-2 sobre el Espanyol de Barcelona en la final. Pero la pandemia de coronavirus llegó para postergar otros campeonatos que le hacía mucha ilusión jugar, como el Promises y la Danone Cup, además de Copa, Liga y el Campeonato de España Sub-12. «Ha sido bastante difícil no poder jugar al fútbol. He echado de menos los partidos y escuchar a nuestra afición», aseguró.
Feliz con su renovación, una gran noticia para pasar la pandemia, dijo sentir el apoyo y la confianza de un club que ya la hace sentir como en su casa. Mientras espera que la pelota vuelva a rodar, soñando con desandar el camino que la lleva a jugar algún día Liga Iberdrola y ser parte del seleccionado español, aprende también del ejemplo de Estefanía Banini, la crack argentina que tiene en sus filas el Levante. «Me gusta mucho. Juego en su posición y me fijo mucho en sus movimientos», dijo. Y sobre la llegada reciente de Aldana Cometti para reforzar la defensa del equipo, agregó: «Espero verla pronto en directo».
Claro que si se trata de modelos a seguir, hay dos jugadoras que Daniela tiene en el podio. Entre las españolas Jenni Hermoso, goleadora del Barcelona y del seleccionado español que es reconocida además por su gran compromiso con distintas causas sociales. Y a nivel internacional Caroline Hansen, la exquisita futbolista noruega, también integrante de la plantilla culé, que este año fue elegida como la mejor jugadora de su país incluso por encima de la ganadora del primer Balón de Oro femenino Ada Hegerberg.
«No sé donde estará el techo de Daniela, pero nadie nos podrá quitar ya lo que hemos vivido y compartido juntos», reconoció papá Oscar. Y nos pareció un final redondo para la historia que, curiosamente, apenas comienza.
Por Juani Portiglia
