San Lorenzo no solo se quedó sin el sueño de ganar la presente edición de la Copa Libertadores. Tras ser eliminado en cuartos de final a manos de Lanús, el conjunto azulgrana también se quedó sin DT: Diego Aguirre dejó su cargo.
«No es momento de hablar de otra cosa que de este partido, ya que estoy muy triste porque no cumplimos el objetivo de seguir avanzando, que era nuestra ilusión», había dicho Aguirre anoche en la conferencia de prensa posterior al partido. Antes había tenido un tenso diálogo en el vestuario con el presidente Matías Lammens.
Y este viernes se precipitó todo: el DT se despidió del plantel y al mediodía se espera una conferencia de prensa en la que comunicará su decisión de alejarse del club de Boedo.
Gabriel Heinze es el candidato número uno para reemplazar a Aguirre, pero tiene una complicación: desde su entorno señalan que no le gusta hacerse cargo de un equipo con el torneo ya iniciado. El segundo nombre en la consideración es Pablo Lavallén, ex DT de Atlético Tucumán. Mucho más atrás aparece Luis Zubeldía, quien fue despedido del Alavés de España. Y hasta algunos hinchas sueñan con el retorno del ingeniero Manuel Pellegrini, quien está en la Superliga de China dirigiendo al Pocho Lavezzi en el Hebei Fortune.
La caída por penales ante el conjunto del Sur fue el punto final a un recorrido lleno de sobresaltos. Fueron varias las veces en que la continuidad de Aguirre había sido puesta en duda. Siempre dependió de algún resultado favorable.
La última vez que el entrenador había quedado contra las cuerdas fue en junio, cuando renovó su contrato por seis meses más únicamente por la ilusión de ganar la Copa Libertadores. El equipo había quedado fuera de carrera anticipadamente en el torneo local ganado por Boca y Deportivo Morón lo había eliminado de la Copa Argentina. El juego del equipo, que no gustaba, era otro aspecto que no convencía a dirigentes e hinchas.
Aguirre cuenta con una extensa trayectoria como DT, la cual comenzó en 2002 en Plaza Colonia, de Uruguay. En su país, fue campeón como entrenador de Peñarol. También dirigió en Ecuador, Perú, Qatar y Brasil, antes de llegar a San Lorenzo, su primera experiencia en el fútbol argentino.
Al conjunto de Boedo arribó en el segundo semestre de 2016 y nunca terminó de convencer. Ya forma parte de la historia