La crisis que se desató en el Barcelona después de la humillante derrota ante el Bayern Munich por 8-2, hizo que el club español comience una profunda «limpieza», donde el técnico, Quique Setién, y el director deportivo, Éric Abidal, fueron removidos de su cargo.
Aunque las autoridades planean deshacerse de varios jugadores, la intención de los dirigentes es seguir contando con Lionel Messi, aunque en los último días, comenzó a correr el rumor de que el crack argentino podría dejar el club. Según La Gazzetta dello Sport, la única condición que pondría el equipo español para la salida de la «Pulga» es que el jugador comunique públicamente que su deseo es el de cambiar de aire.
«La realidad es que Bartomeu ya no ve la despedida de Leo como algo impensable. Sabe que económicamente sería beneficioso para un club en profunda crisis, pero pone una condición: que sea Messi quien diga públicamente que quiere irse. No quiere convertirse al menos formalmente, en el presidente que despidió a Messi», explicó el diario
Por otro lado, Mundo Deportivo maneja información similar, y sostiene que el golpe de la Champions fue tan fuerte para el capitán argentino, que en los próximos días se replanteará su futuro. Ahora, el presidente del Barcelona tiene dos caminos. Uno es seguir convencer a Lionel de quedarse y seducirlo con un proyecto prometedor para pelear la próxima edición del torneo europeo.
El otro camino es aceptar la decisión que tome el jugador e invertir el dinero que entre por su pase en realizar una profunda renovación en su equipo.