«Estoy en la final diez años después».
Juan Martín Del Potro se escucha renovado. Habla con una mezcla de orgullo e incredulidad. Sigue disfrutando de un renacer en su carrera. Y no llega a reflejar sus sentimientos en palabras. Luego de atravesar el karma que vivió con las lesiones en su muñeca, de pasar tres veces por el quirófano y de caer en el ránking de la ATP hasta llegar a las tres cifras, el argentino está de vuelta. Y sueña en grande.
“No esperaba tener esta carrera después de mis problemas en la muñeca. Todo es sorprendente para mí y estoy disfrutando mucho. Cuando entro a la cancha y le muestro mi tenis a los fanáticos, creo que saben de mi esfuerzo para volver y jugar al tenis. Y es lindo el reconocimiento de su parte”, confesó Delpo luego de meterse en la final del ATP 250 de Auckland.
El argentino de 29 años, que a partir del lunes volverá a meterse en el top ten, fue campeón en su última participación sobre el cemento de Nueva Zelanda en 2009 y jugará la final número 30 de su carrera (20-9).
Juan Martin Del Potro celebra tras acceder a la final del ATP de Auckland. AFP
“Estoy feliz. No es fácil llegar a la final y lo hice jugando buen tenis, venciendo a uno de los rivales más duros del circuito y estoy ansioso de poder jugar la final. También va a ser un duro rival para mí”.
Del Potro (12°), segundo cabeza de serie en Auckland, derrotó en semifinales al español David Ferrer, cuatro veces ganador del torneo, 6-4, 6-4 y se metió en la final del certamen donde lo espera otro español, Roberto Bautista Agut (21°) quien venció al holandés Robin Haase en un partido muy disputado por 6-7 (7/9), 7-6 (7/3), 7-6 (7/5).
elpo avisó que no será nada fácil quedarse con el torneo. “Bautista es un jugador peligroso, con experiencia en finales. Ya me ha ganado y será un desafío complicado”.
En el mano a mano con Bautista jugaron cuatro partidos: el primer duelo fue para el español en el Abierto de Australia 2014, pero luego el tandilense hilvanó tres victorias, todas en canchas duras.