Entre las tres goleadoras que dominaron a puro grito sagrado la Zona Clasificación de la Primera B de AFA, Laura Romero, delantera y capitana del Deportivo Español, no solo destaca por haber vuelto habitual una tarea tan difícil como la de marcar de a tres por partido, algo que logró en cinco diferentes, sino además por ser mamá de tres chicos, con todo lo que ello implica a la hora de repartir tareas.
Jugó al baby, se probó y quedó en San Lorenzo aunque luego nunca fue e incluso disputó un Relámpago con Argentinos Juniors sin que nadie supiera que era mujer. Hasta que una amiga la llevó a Las Gallegas, que hoy agradecen todos los días aquella invitación y disfrutan de tener de compañera a la dueña de los hat-trick en el ascenso.
-Qué campeonato venís metiendo…
-La verdad que estábamos re bien. En lo personal, en mi mejor momento. Y justo viene a pasar todo esto. Son muchas las ganas, las ansias de volver y seguir con la misma meta, que es tratar de ascender y dejar a Español en lo más alto.
–¿Y ahora cómo te las arreglás para seguir entrenando?
-Las ganas, la motivación, no son las mismas. Pero yo entreno igual. Todos los días hago rutinas diferentes. No tengo mucho espacio como para correr, entonces trato de hacer piernas, abdominales, un poco de brazos. Obviamente no tengo a disposición un gimnasio. A veces te ponés un poco depre, por las ganas de salir a jugar. Por suerte tengo a mi familia con salud, que es lo más importante.
-¿Cómo se dio tu llegada a Español?
-Arranqué en 2018, cuando estaba finalizando el torneo anterior. O sea que este es mi primer campeonato. Siempre había jugado baby, con varones. Nunca se me dio por cancha de once. Una vez fui con una amiga a hacer una prueba a San Lorenzo.
-¿Y qué pasó con eso?
-Había quedado, pero después ella no me pasó a buscar más y yo tampoco seguí yendo. También jugué un Relámpago con Argentinos Juniors, pero no habían dicho que yo era mujer. Cuando terminó el campeonato se enteraron y quedaron todos muy impresionados. Antes de todo esto yo había tenido la posibilidad de hacer una prueba en la Selección Argentina y en River, por un preparador físico que nos entrenaba en el baby. Pero después quedé embarazada y se cortó esa posibilidad. Tengo tres nenes, entonces había dejado el fútbol. Pero siempre tuve la pelota en la cabeza, nunca me olvidé de jugar.
«Tengo tres nenes, entonces había dejado el fútbol. Pero nunca me olvidé de jugar»
-Y apareció Español…
-Jugué once en el barrio y por mi amiga, Fiorella Roldán, surge la oportunidad de hacer una prueba en Español. Me lancé. A Carlos Torres, que fue el que me probó, le gustó cómo jugué y ahí me fichó.
-Ahora le tienen que hacer una estatua a Fiorella…
-Claro. Tanto Carlos como los ayudantes y las chicas quedaron impresionados. En ese momento la goleadora era Micaela Rodríguez, que después tuvo una pequeña lesión y yo pude ganar terreno. Ahora ella volvió y estamos jugando juntas. Es la dupla .
-Están picantes… Son dos delanteras bien de área
-Sí. Por suerte, en el primer entrenamiento que tuvimos ya nos entendimos demasiado y hasta el día de hoy nos entendemos. Cuando ella se lesionó, se notaba esa ausencia. Tratamos de dar siempre lo mejor. Nunca importaban los goles sino llevarnos los tres puntos.
-Menos mal que no importaban
-Fueron surgiendo. En este último tiempo mucho más.
-En las primeras fechas del campeonato parecía que Jimena Romeo era inalcanzable, pero lo que hicieron vos y Sofía D’Ambrosio en el tramo final fue una locura
-Si, vinimos peleando la punta las dos bastante bien. Después que pasamos a Jimena estaba re peleado. En un tiempo yo estuve arriba, después ella me pasó. En el partido que me sacan roja contra Sarmiento, al siguiente partido metió como cinco o seis goles. Después yo volví y metí cuatro goles. La última fecha creo que ella no jugó y yo jugué contra All Boys, pero solamente pude meter dos. Tuve una en el palo, otra en el travesaño… Pero no se me dio.
-En un momento se hizo un lío bárbaro con los goles, ¿no?
-Yo trato de buscar el registro que lleva AFA. Pero sí, hubo algo que no estaba bien en lo que subieron desde La Futbolista. Yo estaba goleadora con 28 y creo que Sofía tenía 26 (ahora 35). Después ella metió un montón y se hizo lío. Pero ahora creo que está bien. Ella está arriba por un gol. Ahora me dijeron que los goles se contaban solo hasta el último partido de la Zona Clasificación. dicen que la Zona Campeonato arranca de cero. Para mí es raro que ni siquiera hayan nombrado a la goleadora si ya cerró. Y por otro lado que no sigan sumando los goles, porque yo metí uno contra Defensa y Justicia que no sumaron. No sé cómo quedará. La Primera B no tiene mucho seguimiento y pasan estas cosas.
«Cinco hattrick tengo. Con eso empezó a surgir la posibilidad de pelear la tabla de goleadoras»
-Lo que sí tenés, si no me equivoco, es el récord de hat-tricks
-Cinco tengo. No he visto mucho, pero creo que ninguna. Con eso es que empezó a surgir la posibilidad de pelear la tabla de goleadoras y que me vean un poco más.
-Y a todo le sumamos que sos mamá…
-Obvio que mi rutina seguramente es muy distinta a la de ellas. Tengo que levantarme, llevar los chicos a la escuela, ocuparme de la casa, ir a buscarlos, hacerlos merendar… Y después de ahí a entrenar, porque nosotros entrenábamos de 7 a 9 de la noche. Otra vez volver, cocinar, bañar los chicos. Son muchas cosas, se hace complicado a veces. Pero yo siempre trato de dar lo mejor.
-Por todas estas cosas, ¿cuando toca jugar entresemana te complica mucho?
-Está mi pareja, pero igual se complica porque él trabaja. Tratamos de solucionarlo y seguir. Yo estoy haciendo lo que más me gusta y trato de arreglarme con todo lo que se me venga encima.
-Por lo hecho en la primera parte, ¿qué esperás para Español en la Zona Campeonato?
-Está bastante parejo todo. A nosotras nos agarró un poquito desarmadas, porque tenemos chicas que decidieron inclinarse por el estudio. Nos complicó demasiado, porque terminamos quedando con un plantel de unas 14 jugadoras y muchas de las que más necesitábamos se terminaron yendo. Tratamos de hacerle partido a cualquiera con las que estábamos. Pienso que igual está todo muy peleado y tenemos chances de ascender.
«Está todo muy peleado y tenemos chances de ascender»
-Y para colmo hubo muchas sorpresas en la primera fecha
-Es que eso pasa mucho. Nosotras llegamos a estar cuartas en la primera parte, en nuestro mejor momento. Pero como te digo, se fueron jugadoras, nos arreglamos con lo que teníamos. A veces ganás contra el rival que parece superior y después te complicás contra uno de los últimos.
-¿Refuerzos pudieron meter?
-Sí, hicimos los tres. Una arquera, porque solo teníamos una, y dos volantes. Una por derecha y una por izquierda. El tema es que algunas de las jugadoras que perdimos eran muy importantes para el equipo. Pienso que si ellas estuvieran serían muchas más las chances. Pero bueno, ahora hay que acoplarse a los refuerzos. Mucho no se pudo porque jugamos un solo partido y vino todo esto.
-Y es completamente incierto cuándo van a volver, ¿no?
-Va a ser todo muy difícil. Creo que están diciendo de arrancar recién en agosto o septiembre. Es un caos pensar que recién ahí vamos a volver, qué se hará con el resto de los partidos. Estaban diciendo que no iba a ser ida y vuelta sino solo ida. Otros decían que el campeonato va a quedar así y solo ascenderían el primero y el segundo de la tabla anterior, que serían Argentinos y Ferro.
-Sería raro, porque la Zona Campeonato ya empezó
-Claro. Además desanima a todas las que venimos abajo, se hicieron muchos esfuerzos para esta nueva etapa. Por lo menos nosotras, tenemos la mente en ascender y que surjan cosas así la re tiran para abajo. Son rumores igual.
«Ojalá algún día pueda jugar en Boca. Y vestir la camiseta de la Selección Argentina»
-¿Qué pensás para vos y un futuro ligado al fútbol?
-Yo pienso en todo. En dar lo mejor cada partido para que sea lo mejor para Español y también en la posibilidad de que alguna vez empiecen a aparecer esas propuestas que me permitan ser profesional. Esa también es mi meta a futuro.
-¿Y si se trata de soñar con un equipo en especial?
-Boca. Sigo a todas las jugadoras, imagínate. Re emoción. Ojalá algún día. Y vestir la camiseta de la Selección Argentina.
Por Juani Portiglia
