Rafael Nadal llegó al Masters 1000 de Montecarlo con la obligación de ganar por undécima vez este torneo, si es que quiere retener el número uno en el ranking de la ATP. Y después de un buen comienzo, con victorias ante el esloveno Aljaz Bedene y el ruso Karen Kachanov, llegó la hora de volver a encontrarse con el último que lo venció sobre polvo de ladrillo: el austríaco Dominic Thiem, quien venía de eliminar a Novak Djokovic.
En el recuerdo estaba aquella victoria del actual número 7 del mundo, 6-4 y 6-3 en los cuartos de final del Masters 1000 de Roma. Pero también las tres del español en los otros tres cruces de la misma gira de canchas lentas (Madrid, Barcelona y Roland Garros).
Si alguien puede hacerle fuerza a Rafa en esta superficie es Thiem, pero las expectativas puestas en este duelo duraron apenas unos minutos. El número 1 del mundo desplegó todo su arsenal y barrió al austríaco por 6-0 y 6-2, en un partido que duró apenas una hora y siete minutos y le dio el pasaje a las semifinales en el principado de Mónaco.
Este resultado iguala al más aplastante que Nadal había conseguido ante un top 10: 6-0 y 6-2 frente a su compatriota David Ferrer (entonces número 4) en la final de Acapulco en 2013.
Rafa golpea fuerte con su drive en Monecarlo. (REUTERS/Eric Gaillard)
En otras actuaciones inolvidables de Rafa sobre polvo de ladrillo y ante jugadores ubicados entre los diez mejores del mundo, hay un par contra argentinos. En el mismo escenario que se está jugando esta semana, le ganó 6-3 y 6-0 a Gastón Gaudio en los cuartos de final de 2005, y 6-2 y 6-1 a Guillermo Coria en la misma instancia, pero un año más tarde.
Su próximo obstáculo: Grigor Dimitrov
Con la cabeza puesta en ese bendito número uno, de poco le servirá a Rafa lo actuado hasta aquí en la semana si el domingo no levanta el trofeo de campeón. Para llegar a ese objetivo, el próximo paso deberá darlo este sábado, cuando enfrente al búlgaro Grigor Dimitrov, que fue el primero en meterse entre los cuatro mejores del torneo, luego de su trabajosa victoria sobre el belga David Goffin por 6-4 y 7-5 (5).
El historial entre Nadal y el actual número 5 del mundo, marca que el español ganó 10 de las 11 veces en que se enfrentaron.
En las tres veces que se cruzaron sobre polvo de ladrillo, Dimitrov apenas pudo llevarse un set (fue en los cuartos de final de Montecarlo 2013). Y el único triunfo del búlgaro fue en los cuartos de final de Beijing 2016 (6-2 y 6-4), sobre cemento.
El otro semifinalista ya definido es el japonés Kei Nishikori, quien venció al croata Marin Cilic (2º) en tres sets, por 6-4, 6-7 (1/7) y 6-3. Su rival saldrá del duelo que ahora disputan el alemán Alex Zverev (3º) y el francés Richard Gasquet.
