La última Copa América, además de confirmar la necesidad de trabajar más en la solidificación del sistema del VAR, reavivó la antigua polémica sobre el uso de la tecnología en el deporte de alto rendimiento. Del otro lado de la moneda, las Grandes Ligas de Béisbol (MLB) están por incorporar un desarrollo que hasta hace pocos años era impensado: un robot será decisivo en las decisiones arbitrales.
El llamado “robot umpire” ya debutó en ligas menores y prepara su arriba a las mayores. Esta semana el sistema fue utilizado con bastante éxito en un partido de la Atlantic League, una liga menor profesional.
La prueba fue el Juego de Estrellas de esa competencia. El árbitro humano usaba un auricular y un celular. Los equipos estaban conectados con una tecnología instalada en el estadio, que emplea un radar para seguir los lanzamientos. La información de la trayectoria de la bola llegaba directamente al juez. Solamente en algunas ocasiones el árbitro perdió conexión, por lo que allí juzgo los lanzamientos según su visión.
“Mientras no podamos confiar al 100% en este sistema, tengo todavía que ir ahí con la intención de mirar, porque si el sistema falla en registrar un lanzamiento, o si marca como strike una pelota que pasó a pie y medio del plato, tengo que estar preparado para corregir eso”, comentó el umpire humano.
La Atlantic League planea desplegar este sistema en la máxima cantidad de estadios posibles en el corto plazo. Si el resultado es positivo, la llegada de los robots a las mayores es solo una cuestión de tiempo. “Esta idea ha rondado por ahí durante mucho tiempo, y esta es la primera vez que cobra vida en una forma amplia”, aseguró Morgan Sword, vicepresidente de Operaciones Económicas de la MLB.