Una desinteligencia en el régimen de importación del peluche de la mascota «Pandi», el yaguareté representativo de los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018, obligó a que la organización prohíba la venta en las sedes de competencia, cuando suele ser un furor de este tipo de eventos deportivos.
La información trascendió durante el fin de semana largo, luego de que ante cada consulta en las tiendas oficiales de merchandising de los Juegos de la Juventud, los empleados daban diferentes razones a la falta de peluches.
Entre sábado y domingo se tachó o tapó en el listado de precios de las tiendas el rubro «Mascota/Mascot» a un precio de 1500 pesos. Este lunes feriado, directamente, se colocó una nueva gráfica por encima de la antigua.
El regalo de la mascota de cada evento importante deportivo suele ser una tradición para los visitantes y turistas que participan de ellos. En estos Juegos de la Juventud, solo los deportistas y la «Familia Olímpica» pudo hacerse acreedor de los peluches de la mascota de Buenos Aires 2018.
¿Por qué? Según fuentes de AFIP citadas por la agencia internacional alemana DPA, hubo una «desinteligencia» en el papeleo para el ingreso del container de 370 kilogramos de peluches a la Argentina.
El problema surgió a raíz que el importador del peluche intentó ingresarlo a la Argentina como otro producto, sin pasar las exigencias que debe cumplir un juguete para ser vendido al público.
Entonces, la salida elegante fue que se puedan retirar y entregarse, al menos, a los atletas en las ceremonias de premiación, pero por un régimen que prohibía su venta en las tiendas oficiales por «falta de estampillado».