El marcador final fue 1-6, 2-6, 7-5, 7-6 (0) y 6-2 para el tenista porteño, que parecía abatido y al que todos daban por acabado tras el intenso dominio del sudafricano en los dos primeros parciales.
El encuentro duró casi cuatro horas y Anderson estuvo break a favor en el tercer set, para definirlo en parciales corridos. Sin embargo. Schwartzman nunca perdió la paciencia pese a verse ampliamente superado y lentamente tomó el control del partido.
De esta forma, el Peque está por segunda vez en cuartos de final de un Grand Slam (ya lo había hecho en el US Open del año pasado) y por primera vez lo logra en Roland Garros.
Ahora, en la siguiente instancia, el argentino tendrá enfrente a la «bestia negra», nada menos que Rafael Nadal, quien superó al alemán Maximilian Marterer.
