Un día después de que el fiscal Federico Delgado pidiera investigar una denuncia contra la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, y las autoridades del Gobierno porteño en la materia a raíz del operativo antes del superclásico, podrían citar a declarar al presidente de Boca, Daniel Angelici, y a la diputada Elisa Carrió, quien aseguró que es un «operador judicial».
La final de la Copa Libertadores fue suspendida hasta nuevo aviso, pero una denuncia impulsó una investigación por el operativo de seguridad que no previno el ataque al micro de Boca. La Justicia Federal analiza ahora las responsabilidades de los funcionarios nacionales y locales.
El abogado denunciante, Fabián Bergenfeld, apuntó contra la ministra Bullrich, el ahora ex ministro de Seguridad de la Ciudad, Martín Ocampo, el secretario de esa cartera, Marcelo Dalessandro, el director de la Prefectura Naval Argentina, Eduardo Scarzello, y el subjefe de la policía porteña, Gabriel Berard.
Sin hacer imputaciones con nombre y apellido, el fiscal a cargo de la causa hizo referencia a las acusaciones de Bergenfeld, quien a su vez pidió ser tenido como parte querellante en la causa y que se cite a Angelici por las versiones periodísticas que dan cuenta de un «entramado oculto» en el que podría estar incluido Ocampo.
También pidió que se cite a Elisa Carrió porque la diputada tildó a Angelici de ser un «operador judicial» en varias oportunidades.
«Tras realizar un análisis de los hechos descriptos en la denuncia, a lo cual se suman artículos y comentarios periodísticos idóneos que dejan entrever la existencia de un entramado oculto, conforme al cual la actuación del saliente ministro de Seguridad Ocampo y con él la fuerza a su cargo habría estado condicionado por quien lo ubicó en ese puesto, Dr. Angelici, es que solicito se cite a declarar a dicho dirigente en calidad de testigo», expresó Bergenfeld.
«Asimismo, y siendo que en reiteradas ocasiones la Dra. Elisa Carrió ha cuestionado el accionar de operador judicial del Dr.Angelici, es que solicito se la cite a prestar declaración testimonial a fin de que describa si tal operatoria, pudo producirse en este caso ejerciendo su influencia sobre el mencionado Ocampo», estableció en su pedido el abogado.
Bergenfeld fundó su petición en que «no sólo es socio del Club Atlético River Plate, sino que además resulta ser damnificado directo por los hechos denunciados en autos».
«En efecto; tal como se acredita con la copia certificada del carnet social del suscripto, y de las entradas nominativas por mí adquiridas por un precio total de $5.550 pertenecientes a mí y a mis hijos, fuimos tres de los frustrados espectadores que concurrimos al encuentro futbolístico que se iba a disputar el pasado sábado 24, y a raíz de una sucesión de postergaciones el pasado domingo 25», escribió.
Bergenfeld presentó su escrito tras haber pasado un sábado de terror en el Monumental con sus hijos mientras se sucedían los hechos de violencia en la calle, en particular contra el micro del plantel de Boca.
«Arribamos al primer vallado de control a cargo de la Prefectura a las 13.15 hs del día sábado, y tras pasar por los sucesivos controles de documentación y cacheo llegamos a la platea a las 14hs. Allí, soportando altas temperaturas y por momentos hasta carencias de hidratación, permanecimos hasta las 20hs. mientras recibíamos la información de las sucesivas suspensiones por los hechos de público conocimiento, que se suscitaban a varias cuadras del estadio ante la total inoperancia de las fuerzas de seguridad», describió.
A los efectos el fiscal Delgado ya pidió al juez Marcelo Martinez de Giorgi las imágenes del paso del micro y que las mismas sean comparadas con anteriores partidos disputados entre Boca y River para identificar las irregularidades del operativo del sábado y para investigar si se cumplió el protocolo de seguridad en el marco del operativo antes del ingreso de los jugadores al estadio.
Para Bergenfeld se trató de un plan pergeñado por lo más alto de la política nacional con omisiones intencionales.
