Serena Williams se impuso a su hermana Venus, en el duelo estadounidense por el título en el Abierto de Australia, por 6-4 y 6-4, para recuperar así el puesto de número uno del mundo, y conquistar este título por séptima vez, y sin ceder un set.
Serena, además rompió la igualdad que mantenía con la alemana Steffi Graf y figura ahora con 23 Grand Slams, a un solo título de Margaret Court. Todo ello, en 88 minutos de una final pobre en cuanto a juego, y que acabó con 46 errores no forzados, 25 de ellos para Venus.