Pampeana con acento cordobés, hincha de Boca. De padre y hermano arqueros, Yasmin Roston se abrió camino en el fútbol como preparadora física y actualmente trabaja en General Paz Juniors, tanto con la Primera División femenina como con la Sexta y Séptima División del masculino.
Nunca dudó en volverse dueña de ese legado cultural que a tantas mujeres les corresponde por herencia familiar, pero de la que por mucho tiempo habían sido desplazadas por el deseo patriarcal de exclusividad. Con el cuerpo y la mente al servicio de la lucha por conquistar nuevos espacios, defiende la profesionalización de los cuerpos técnicos en torno al fútbol femenino, así como la necesidad de incrementar los volúmenes de entrenamientos. El premio a esos esfuerzos, está convencida, será ganancia para todas.
-¿Cómo llegás a Córdoba desde La Pampa? ¿Y cómo se dio la posibilidad de empezar a trabajar en General Paz Juniors?
-Me vine a Córdoba para estudiar el profesorado de educación física. Me recibí y empecé a estudiar kinesiología, que ya llevo por el quinto año. Este es el cuarto año que estoy trabajando con el femenino de Juniors, a donde llegué por un contacto que tenía con otro profe muy reconocido acá en Córdoba. Después se abrió la posibilidad de trabajar también con inferiores del masculino. Fue un logro importante para mí, porque en el fútbol de Córdoba no hay profes mujeres dentro de las inferiores. Estoy con Sexta y Séptima. Es toda una responsabilidad, porque es la posibilidad de abrir y disputar los espacios para que haya más mujeres dentro de los clubes.
-Da la sensación de que no trabajás donde podés, sino donde querés. No cualquiera se da ese lujo.
-Es así. Estoy donde quiero estar. Me encaminé y empecé a especializar en el fútbol. Vengo de una familia muy futbolera. Mi papá fue arquero toda su vida, mi abuelo también. Mi hermano Braian es arquero en All Boys de Santa Rosa, que está jugando el Regional Amateur. Desde chica tengo el fútbol en la sangre. Ese capital cultural tan valioso para nuestra sociedad se nos ha quitado mucho tiempo, se nos ha dejado relegadas. Con todo lo que yo viví desde chica, no podía ser de otra manera que estar hoy trabajando en el fútbol, haciendo lo que me gusta y llevando adelante la herencia familiar.
-Ví que en All Boys también trabajaste…
-Estuve haciendo una ayudantía, porque normalmente los veranos viajo para allá. El profe de la Primera División me preguntó si quería involucrarme y obviamente le dije que sí. Estuvimos todo un verano. También un invierno de pretemporada, de cara al Torneo Federal que todavía se jugaba en ese momento. Fue de mis primeras experiencias en el fútbol. Estoy muy agradecida con los profes que me dejaron involucrarme, porque era muy chica y porque era mujer.
-¿Por jugar no se te dio?
-¡Juego también! Pero de manera más amateur. Trato de separarme un poquito, porque como soy PF por ahí me corresponde estar en un lugar de mayor autoridad, por decirlo de alguna manera. Entonces trato de no mezclarme con el fútbol femenino, porque las jugadoras son mis alumnas e incluso muchas de ellas son más grandes que yo, que tengo 25 años. Juego fútbol siete, mixto. Dos veces por semana.
-Tu tarea requiere del estudio y el aprendizaje constante. ¿Qué cosas considerás fundamentales para no quedar desactualizada?
-La preparación física en el fútbol está cambiando mucho. Hace algunos años atrás se basaba en una metodología de trabajo orientada al atletismo. Entonces, las tareas que se programaban eran bastante descontextualizadas. Se hacían unas pasaditas afuera de la cancha y después una hora de fútbol. Eso fue cambiando. Se fueron generando nuevas metodologías de trabajo como la periodización táctica o el microciclo estructurado, que nos enseñan a nosotros los profes a entender al fútbol como un todo y a no entender la preparación física fuera de ese contexto, sino dentro de una intención táctica. Eso a nosotros nos sirve para trabajar la parte física sin olvidarnos de la parte técnica, táctica y psicológica. Esa evolución hace que vos te tengas que actualizar todo el tiempo y estar atenta a las nuevas investigaciones y estudios que van saliendo, tratando de escuchar a los metodólogos más importantes del fútbol. Cuanto más sabés te empezás a dar cuenta de todo lo que te falta saber. Es una rueda que te va llevando a capacitarte cada vez más.
«Los profes tenemos que entender el fútbol como un todo. La preparación física no está fuera de ese contexto, sino que depende de una intención táctica»
-¿Y qué te pasa cuando ves que en muchos equipos de fútbol femenino no tienen PF especializado?
-Es muy importante que los clubes de fútbol femenino tengan profesionales a cargo. Como también es importante reconocer que hoy tenemos tres problemáticas principales: una de ellas es esa falta de profesionalización de los cuerpos técnicos; otra la falta de volumen de entrenamiento, tanto microsemanal como anual; y la otra es la falta de volumen de entrenamiento en todo el periodo de vida de la jugadora. Esta última tiene que ver con que en muchos casos una nena que empieza a jugar a los cinco años tiene que cortar a los siete u ocho porque no tiene liga en la que jugar al fútbol. Por ahí vuelve a involucrarse a los 20 años, jugando algún torneo de fútbol siete o campeonato de barrio. Muchas veces, la jugadora que nos llega a nosotros pasó diez años sin jugar al fútbol.
-¿Cómo se convence a una jugadora amateur de realizar los esfuerzos que conlleva hacer una preparación física al estilo profesional, cuando la devolución de los clubes a ese sacrificio después es casi nula?
-El objetivo está en armar una buena estructura desde el cuerpo técnico y el equipo en sí, que haya una gran familiarización entre todos y todas, que podamos entender que lo más importante de este proceso que es histórico no solamente es jugar al fútbol sino empezar a generar espacios. Y una forma de generar esos espacios es no abandonando. Entonces es muy importante que las jugadoras generen ese sentimiento, entre ellas y hacia los profes, para que no dejen, para que puedan hacer los que les gusta y a la vez llevar adelante esa revolución.
«Lo más importante de este proceso que es histórico no solamente es jugar al fútbol, sino empezar a generar espacios. Una forma de generarlos es no abandonando»
-Una lucha colectiva…
-Yo tengo ganas de llegar a AFA, tengo ganas de llegar al Barcelona, como imagino que le pasará a muchas. Entonces hay que entender que esto tiene que crecer para que crezcamos todas. Y que hay que comprometerse.
FEMINISMO, FÚTBOL Y MILITANCIA
-¿Sos una militante del feminismo?
-Sí, hace tres años que milito dentro del feminismo. La idea es también llevarlo al fútbol. Crear un fútbol feminista donde haya otras formas de construir, lejos de la violencia en las canchas, que sea para todos y todas. Me considero también una militante de ese fútbol.
-¿Y por qué crees que el fútbol femenino se embanderó tanto con la gran mayoría de las luchas del feminismo y viceversa?
-Lo que veo es que las mujeres siempre fueron parte del fútbol. Por ahí en otro momento tocaba ser la que acompañaba al marido a la cancha o la que asistía al hijo que jugaba. Pero en las tribunas, siempre hubo mujeres. El fútbol es un valor cultural tan arraigado que lo juegan desde las personas de mayores recursos a la de más bajos recursos económicos. Es apasionante. A nosotras siempre nos excluyeron de ese espacio, del juego, y hoy tenemos que entender que es un derecho apoderarnos nosotras también de ese valor cultural.
-¿No te da miedo que a partir de ahí se empiecen a contagiar también muchos de los vicios del fútbol masculino?
-Nosotras como hinchas de fútbol, yo soy de Boca y desde muy chica miro partidos, tenemos esa cosa del hincha argentino que obviamente tuve que cambiar. No da ir a ver un partido de inferiores y putear al nenito de doce años que está adentro de la cancha. Como hincha también me tuve que desconstruir y entender cuáles son las lógicas del deporte.
-¿Y cuando son ustedes las que están adentro de la cancha?
-Dentro de los equipos también pasa que se quieren agarrar a las piñas en un partido, porque las emociones juegan de manera extrema. Entonces la idea es decir bueno vengan jugadoras, qué pasó, por qué pasó, cuál es la idea de nuestro fútbol. El miedo a perder esa identidad con la popularización está, pero creo que con que ya esté la mujer ahí adentro hay varias cosas que van a empezar a cambiar, porque esa identidad es masculina, es patriarcal. Con que haya una mujer ahí va a empezar a romper esas masculinidades.
«Con que esté la mujer ahí adentro va a romper con muchas de esas masculinidades que tiene el fútbol»
-Como espectáculo, imagino que la intención es conquistar tanto a hinchas mujeres como a hinchas hombres…
-Obviamente, esa es la apuesta. Al final de cuentas, el fútbol es juego. Apasionante, cultural y más allá de quién lo está jugando nos brinda un espectáculo hermoso y sumamente vistoso.
TIPS PARA ENTRENARSE EN CUARENTENA
-¿Cómo están trabajando en Juniors desde que arrancó la cuarentena obligatoria?
-Con las jugadoras y los jugadores nos estamos manejando a través de videos. Filmo la rutina del entrenamiento, que hago yo, y se los voy mandando. También utilizamos plataformas virtuales, a través de las cuales nos conectamos todas y todos. Desde ahí yo doy la clase y ellos van haciendo.
-¿Cambia mucho respecto de los entrenamientos que venían haciendo antes del aislamiento?
-Lo más importante a tener en cuenta es que la cosa está jodida. A nivel mundial el panorama no es agradable, hay mucha incertidumbre. Entonces más allá de hacer preparación física para el fútbol, en estos tiempos hay que hacer preparación física para mantener bien la salud. El ejercicio físico disminuye la ansiedad, cambia el humor, te ayuda a mantener una buena alimentación, te ayuda a dormir. Los ritmos circadianos, que son relojes biológicos que nosotros tenemos y que se controlan y regulan mediante la luz, son muy importantes. Yo a la jugadora le digo mirá, salí a la mañana a tomar un poquito de sol, poné la cara al sol, comé bien, hacé actividad física… Eso para mí es lo más importante. Después, el entrenamiento es basado en el juego, entonces si el fútbol tiene movimientos de aceleración, desaceleración y cambios de dirección, los cuerpos tienen que responder a eso. Entonces, en los planes de entrenamiento tiene que haber ejercicios de fuerza para que respondan a los movimientos reales del juego, para que cuando volvamos las consecuencias de este encierro sean mucho menores.
-¿Qué le recomendás a aquellas jugadoras que no tuvieron la suerte de recibir un plan de entrenamiento para estos días?
-La receta ideal no existe. A veces hay una sobre-información que lleva al sobre-entrenamiento. Esta bueno que puedan recurrir a un profe cercano que pueda recomendarles qué hacer en cada caso particular. Pero todo lo que sea entrenamiento de la fuerza, saltos en tu casa, repiqueteos, trabajos intermitentes de tiempo de trabajo por tiempo de pausa, son ejercicios que van a venir muy bien tanto para la salud como para el fútbol.
Por Juani Portiglia
