El mandatario afirmó que la economía experimentará un declive para después recuperarse. Asimismo, proyectó que hacia mediados de año se levantarán las restricciones cambiarias y volvió a mencionar la opción de la dolarización
Javier Milei anticipó un panorama sombrío para los meses venideros, sugiriendo que alcanzaremos el punto más bajo en marzo y abril
En medio de un drástico ajuste implementado por el Gobierno desde el inicio de su gestión, el presidente Javier Milei proyectó que «tocaremos fondo en marzo y abril». Según las estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), el mandatario anticipa que la economía argentina experimentará una fase descendente para luego recuperarse. «Tendremos un primer tramo de caída, estimando que la etapa más difícil será alrededor de marzo y abril. A partir de ahí, tocaremos fondo y comenzaremos a repuntar. Al levantar el cepo, la economía se disparará», explicó Milei.
Ante la posibilidad de un aumento de las protestas callejeras debido a la situación social, el Presidente no lo ve como un problema, confiando en las Fuerzas de Seguridad. En cuanto a la situación económica, Milei subrayó que el «momento más crítico del ajuste aún no ha terminado» y enfatizó que no se relajarán en términos fiscales hasta que se haya consolidado el equilibrio.
Respecto a la dolarización, Milei señaló que están trabajando en limpiar el balance del Banco Central y destacó que el dólar ha caído porque hay escasez de pesos. Si continúan con el ritmo actual, podrían limpiar el balance del BCRA y levantar el cepo antes de mediados de año, según las estimaciones del FMI.
Sobre la inflación, Milei afirmó que están logrando reducirla, destacando el descenso de diciembre al 25% y proyectando una cifra inferior al 15% para enero, a pesar de las dificultades estacionales. Según indicadores de alta frecuencia, sugirió que la inflación de febrero podría ubicarse alrededor del 10%.
En relación con la política, Milei habló de un «ordenamiento político» tras el fracaso de la Ley Ómnibus. Recordó su propuesta de internas con Bullrich y Macri y planteó la posibilidad de una fusión entre el PRO y la Libertad Avanza. Tras el fracaso de la Ley Bases, consideró que se logró un «éxito político enorme» al ordenar el tablero político.