Un juez de Brasilia autorizó a los psicólogos a tratar a la homosexualidad como una enfermedad y a que inicien tratamientos de «reversión sexual».
La decisión fue tomada por el juez Waldemar Claudio de Carvalho en una medida cautelar presentada por un grupo de psicólogos defensores de la terapia de «reversión sexual», un tratamiento prohibido desde 1999 por el Consejo Federal de Psicología.
El juez autorizó a los psicólogos a tener libertad de aplicar la «reversión sexual» para trabajar con gays y lesbianas.
En un comunicado, el Consejo Federal de Psicología de Brasil afirmó que el fallo del magistrado va en dirección contraria hacia la protección de los derechos de la comunidad homosexual «y aumenta los prejuicios en un país con altos índices de violencia y muertes por LGBTfobia».
En esa misma línea, el presidente de la Asociación Brasileña de Gays, Lesbianas, Travestis y Transexuales (ABGLT), Symmy Larrat, consideró que la decisión «repone un escenario en el los homosexuales son tratados como enfermos. Sabemos que se hacen torturas y exorcismos» en el marco del tratamiento de «reorientación sexual».