Dos médicos israelíes de la Universidad Hebrea de Jerusalén adelantaron que la cepa ómicron de coronavirus podría ser «la luz al final del túnel» respecto a la pandemia.
Según explicaron, el hecho de que la cepa sea más infecciosa y menos agresiva que las variantes anteriores es un buen indicio. «Por lo general, los virus que son muy agresivos no son muy infecciosos y los virus que no son muy infecciosos, no son muy agresivos. Si se mira desde el punto de vista de la pandemia el final llegará cuando tengamos una variante muy infecciosa con síntomas muy leves», aseguró Zvika Granot, Director del Laboratorio de Biología del desarrollo e investigación del cáncer.
Por su parte, Amnón Lahad, del departamento de medicina familiar, manifestó: «Si miramos más a fondo, vemos que si bien hay un aumento en las pruebas de PCR positivas, el número de casos graves está disminuyendo o al menos es estable».