El Papa Francisco pidió este miércoles por el fin de la guerra entre Rusia y Ucrania y exclamó: “¡Señor Jesucristo, Hijo de Dios, te suplicamos! ¡Detén la mano de Caín!”. Además, pronunció ante los fieles en el aula Pablo VI una emocionante oración escrita por el arzobispo de Nápoles, Mimmo Battaglia.
“Perdónanos, Señor, si seguimos matando a nuestro hermano, si seguimos como Caín quitando las piedras de nuestro campo para matar a Abel. Perdónanos, si seguimos justificando la crueldad con nuestro cansancio, si con nuestro dolor legitimamos la brutalidad de nuestras acciones”, rezó el Papa.
Antes de celebrar la audiencia, el papa también recordó a los niños que huyen de las bombas en Ucrania y “que están sufriendo” y dijo que son “víctimas de la soberbia de los adultos”, al encontrarse con un grupo de estudiantes italianos antes de la audiencia general.
“Y ahora os pido que penséis, que hagáis una reflexión: pensemos en tantos niños, chicos, chicas, que están en guerra, que están sufriendo hoy en Ucrania. Son como tú, como vosotros, de seis, siete, diez, catorce años…”, indicó en su saludo en la basílica de San Pedro a los alumnos de la Escuela “La Zolla” de Milán. “Tenéis un futuro por delante, una seguridad de crecer en una sociedad de paz, en cambio estos pequeños y pequeñas, tienen que huir de las bombas, están sufriendo…con ese frío que hace”, añadió.