La calle amaneció cubierta en chocolate. El inusual hecho ocurrió en la ciudad alemana de Werl, cuando un tanque de almacenamiento se desbordó y produjo la escena, digna de una película infantil.
Varias máquinas de bomberos y personal tuvieron que ser desplegados a Westönnen, un suburbio de la ciudad de Werl, para atender la emergencia ocurrida en la compañía DreiMeister.
«Alrededor de una tonelada de chocolate salió fluyendo al patio y de allí a la calle», dijo un portavoz de la brigada contra incendios Werl en un comunicado. «Se formó un choco-pancake de diez metros cuadrados», agregó la declaración.
Y aunque la escena podría parecer una delicia, en realidad la capa de chocolate se solidificó y tuvo que ser removida por 25 bomberos usando palas y agua caliente, así como sopletes.
El diario alemán Soester Anzeiger reportó que un “pequeño defecto técnico” produjo el derrame que “hubiera sido un desastre justo antes de la Navidad”.
Antes los cientos de bromas y comentarios en redes sociales, las autoridades también se tomaron la inusual situación y aseguraron que “una Navidad sin chocolate no va a ocurrir”.