El régimen ya ha tomado acciones similares en el pasado, limitando el acceso a internet en momentos de manifestaciones. La Sociedad Interamericana de Prensa condenó la interrupción del servicio
La dictadura cubana restringió este lunes el acceso a redes sociales y aplicaciones de mensajería tras las multitudinarias manifestaciones pacíficas que fueron reprimidas por el régimen castrista el domingo.
Redes sociales como Facebook y Instagram, y aplicaciones de mensajería como WhatsApp y Telegram no se pueden utilizar, según informó el sitio NetBlocks.
“Es probable que las restricciones limiten el flujo de información desde Cuba luego de las protestas en las que participaron miles de personas contra el gobierno socialista”, denunció NetBlocks en su sitio web.
Acciones similares a este tipo ya las había tomado la dictadura caribeña durante las protestas en La Habana de noviembre de 2020 lideradas por el movimiento artístico San Isidro.
“NetBlocks recomienda que los gobiernos cumplan con las normas internacionales y los marcos de gobernanza de Internet y garanticen una conectividad confiable, incluso en momentos de disturbios políticos”, dijo la organización que se dedica al monitoreo de internet.
“Esto parece ser la respuesta a una protesta impulsada en las redes sociales”, dijo Alp Toker, director de NetBlocks.
Toker señaló que, si bien la reciente facilitación del acceso a internet por parte de las autoridades cubanas ha aumentado la actividad en las redes sociales, el nivel de censura también ha ido al alza. El corte no sólo bloquea las voces externas, dijo, sino que también silencia “la voz interna de la población que quería expresarse”.
El acceso a internet en Cuba ha sido históricamente caro y relativamente escaso, de acuerdo con grupos defensores de derechos. El gobierno cubano restringe a los medios independientes en el territorio y “bloquea rutinariamente el acceso dentro de Cuba a muchos sitios web de noticias y blogs”, de acuerdo con Human Rights Watch.
Concentración celebrada este lunes frente a las puertas del Congreso de los Diputados para exhortar al gobierno de Cuba a que no reprima de forma violenta manifestaciones pacíficas. EFE/Fernando Villar
Por su parte, la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) condenó este lunes el arresto y los ataques a periodistas independientes en Cuba durante las protestas ocurridas el pasado domingo, y denunció la interrupción del servicio de internet mientras las manifestaciones se transmitían por las redes sociales.
En un comunicado, la organización regional denunció además el llamado al uso de la fuerza “con la clara intención de cercenar las libertades de asociación, de prensa y expresión”.
Durante las protestas sociales que grupos de ciudadanos efectuaron en diversas localidades y provincias del país “fueron agredidos y arrestados en forma arbitraria varios periodistas”, denunció la SIP, con sede en Miami (Florida).
Entre los reporteros independientes “afectados” se encuentran Héctor Luis Valdés, del portal digital ADN Cuba; Ramón Espinosa, fotorreportero de la agencia The Associated Press (AP), y un camarógrafo de esa agencia, quienes fueron atacados por agentes de las fuerzas de seguridad mientras cubrían las manifestaciones en una zona céntrica de La Habana.
Hasta el momento se desconoce la cantidad de comunicadores “censurados” y a quiénes “les confiscaron sus celulares y equipos de trabajo y padecen la interrupción de las comunicaciones por internet”, agregó el comunicado.
“Condenamos las agresiones del régimen contra las personas que se estaban manifestando y también contra los periodistas que cubrían los hechos”, en especial el llamado del presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, a que “se use la fuerza, con la clara intención de cercenar las libertades de asociación, de prensa y expresión”, señaló Jorge Canahuati, presidente de la SIP.
La gente reacciona durante manifestaciones contra el gobierno, en medio del brote de la enfermedad del coronavirus (COVID-19), en La Habana, Cuba. 11 de julio de 2021. REUTERS/Colaborador
Miles de cubanos tomaron las calles ayer para protestar contra el Gobierno al grito de “¡Libertad!” en una jornada inédita que se saldó con cientos de detenidos y enfrentamientos después de que Díaz-Canel conminara por televisión a sus partidarios a salir a enfrentar a los manifestantes y defender la Revolución.
El domingo, toda Cuba quedó desconectado por algo menos de 30 minutos, tras lo cual hubo cortes intermitentes pero considerables durante varias horas, según Doug Madory, de Kentik, una compañía de gestión de redes.
Comentó que los cortes de internet de gran tamaño eran algo muy raro en Cuba, hasta hace muy poco.
Según la SIP, las manifestaciones se transmitían en vivo por Facebook cuando repentinamente el servicio de conexión a internet se interrumpió en todo el país.
Una vez más, la SIP denunció el uso del monopolio estatal de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba SA (ETECSA) para silenciar a los periodistas independientes.
Las manifestaciones recientes “son un reflejo del cansancio de los cubanos por un Gobierno que se sigue creyendo propietario de la vida y el destino de sus ciudadanos”, añadió en el comunicado Carlos Jornet, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP.
“Esperamos que el régimen no busque crear otra primavera negra”, agregó Jornet al recordar la represión y la cárcel que debieron pagar muchos cubanos, entre ellos varios comunicadores independientes, tras las protestas sociales en 2003.
(Con información de EFE y AP)