La contribución del arquitecto a la universalidad de la ciudad condal es evidente; los grandes emblemas modernistas y la majestuosidad de sus estructuras siguen atrayendo a viajeros de todo el mundo
Las simbiosis entre Barcelona y Gaudí es el gran atractivo turístico de la ciudad
Pocas ciudades del mundo tienen un vínculo tan estrecho con un arquitecto en particular. Pero, si además, esa ciudad tiene un rico patrimonio e historia y el arquitecto a la que se vincula su gran transformación es un genio de la categoría de Gaudí el éxito está asegurado. Hay poca duda de que la capital catalana es una de las más cosmopolitas de Europa, eso, unida a su impulso tras los juegos olímpicos y a una perfecta estrategia turística de calidad hacen que millones de personas la tomen como destino predilecto.
No obstante, si existe una edificación que asombra a todo visitante esa es la Sagrada Familia. El majestuoso templo, con dimensiones catedralicias, es el culmen de la obra de Gaudí que él jamás vio terminada, entre otras cosas, porque aún en la actualidad se sigue construyendo. La magia del recinto, llama al visitante, por eso, es interesante hacerse con el Sagrada Familia tickets, que mejorará, sin duda, la experiencia de entrada al monumento inacabado más famoso del mundo. Evitar largas colas y esperas innecesarias, por supuesto, permite al viajero ganar tiempo para seguir conociendo la ciudad.
La falta de previsión, sobre todo en las épocas de alta temporada, puede hacer que esa pérdida de tiempo no deje disfrutar del amplio catálogo de posibilidades que tiene Barcelona para el viajero. Comprar con antelación, en la tienda online, estos tickets evita sufrir inclemencias de tiempo en colas de espera, a hacer más eficaz la visita y, por supuesto, se evita tener que llevar dinero en efectivo o que surjan problemas en el pago.
La inconmensurable huella de Gaudí en Barcelona
Tras la interpretación magistral de Montserrat Caballé y Freddy Mercury con motivo de los Juegos Olímpicos de 1992, el nombre de Barcelona no solo se popularizó por la competición deportiva, sino por dar nombre a un tema musical que desde entonces universalizó, más si cabe, a la ciudad. Pero, décadas antes, otro artista, el arquitecto Gaudí, ya había comenzado a transformar el concepto de arquitectura, utilizando la modernidad, pero con conceptos majestuosos de estilos centenarios como el gótico. Convirtiéndo así la ciudad en un parque temático de la vanguardia más exquisita y meca del modernismo.
Como gran ejemplo de ello está el Parque Güell. Azulejos de colores, vegetación y fauna de fantasía, columnas que pierden la verticalidad, líneas rectas que desaparecen para hacer de balcón en una de las atalayas más imponentes de Barcelona. Tener a los pies una ciudad tan generosa como está, es posible adquiriendo un ticket Park Guell, permite visitar el recinto con comodidad y además contar con servicios adicionales como el de guía.
Tal es la envergadura arquitectónica y la belleza de este monumento que la Unesco lo declaró Patrimonio de la Humanidad. La técnica de Gaudí el trencadís se aprecia claramente en el famoso lagarto. Por supuesto, la joya de la corona de este recinto es la casa del propio Gaudí, un lugar en el que residió hasta su accidentada muerte.
En ella, además de empaparse de la energía del genio, también se podrán ver bocetos, planos y maquetas de sus creaciones.
Hay personas que viven en edificios diseñados por Gaudí
Eso sí que es un privilegio. Porque es evidente que el arquitecto no solo se dedicó a realizar templos neogóticos naturalistas, ni parques de trencadis, sino que también diseñó edificios y fincas en el centro y el ensanche barcelonés que, aún a día de hoy, sirven, en algunos casos, de residencia a diferentes familias.
Sin duda, habitar un apartamento o piso en una de estas casas tiene un valor añadido. Debe ser muy gratificante habitar dentro de una obra de arte. Sin embargo, también es posible hacer visitas a algunas de las más famosas. Las entradas Casa Batlló, concretamente, en este edificio es obligatorio adquirirlas, por estar ocupado por salas de exposiciones y por el propio universo de Gaudí. Es un edificio culmen del modernismo que se estudia en las mejores escuelas de arquitectura. Porque Gaudí, no solo se centra en hacer espacios atractivos, sino en significarse con elementos propios y, sobre todo, que causan sensación en todas las personas que lo habitan o lo visitan.
Está claro que Gaudí y Barcelona no dejan a ningún visitante indiferente. Esa es la intención en una visita a la ciudad condal teniendo como fin adentrarse en el universo de este arquitecto.
Otra de las obras importantes es la Casa de la Pedrera o Casa Milá ubicada en pleno Paseo de Gracia. Las geometrías caprichosas, que se ejecutan hasta en las chimeneas del edificio confieren desde la entrada hasta la azotea. No obstante, es conveniente adquirir las entradas La Pedrera con antelación, además de la visita autoguiada y de la exposición de maquetas del ático, se podrá disfrutar de un espectáculo en sus terrazas, eso tendrá que reservarse aparte, pero desde luego tampoco deja indiferente.
Los ejemplos del arquitecto en la edificación particular pasan por otras famosas casas y edificios como la Casa Vicens, en la que trabajó Gaudí siendo, aún, estudiante de la Escuela de Arquitectos. De ahí que se denote la maestría y lo destacado que era ya el personaje, antes incluso de titularse.
En este edificio se dejó influenciar por el arte mudéjar, muy típico en el sur de España, así como en aires persas y bizantinos. Aquí todavía no había desarrollado su universo particular, pero ya apuntaba maneras. Por eso, hacer un recorrido comenzando por aquí puede ser muy interesante para ver la evolución y la explosión imaginativa.
Por otro lado, la portada de la Finca Miralles, sin embargo, sí que recoge casi todos los elementos de los que se valió el arquitecto, líneas onduladas, forja, arcos, trencadís y azulejería.
En resumen, darse un paseo por Barcelona y conocer la excelsa obra de Gaudí es algo que agradecerán los sentidos y que valdrá la pena haber hecho la visita. Si a eso, se añade una buena política de compra de entradas anticipadas para ganar tiempo y comodidad, la experiencia será, aún, más positiva.