La población venezolana, de manera cívica y en calma, se mantuvo mayoritariamente en casa o se dirigió a plazas y parques cercanos a sus hogares.
Desde la tarde del 7 de marzo, Venezuela enfrentó un apagón nacional que afectó a 18 estados, más del 70 por ciento del territorio. Un daño sin distinción, dirigido a la población.
El ataque contra el sistema eléctrico en Venezuela, que por más de 24 horas afectó a un 70 por ciento de la población desde la tarde del 7 de marzo, fue un ataque sin distinción de gran envergadura en 18 estados de ese país, enfatizaron las autoridades.
¿Qué produjo el apagón nacional?
Fue atacado el control automatizado de regulación del sistema de la Central Hidroeléctrica Simón Bolívar, conocida también como El Guri. La planta de luz que abastece gran parte del territorio venezolano sufrió una agresión cibernética,; tres de los cinco generadores de respaldo fueron saboteados. Así lo informó el vicepresidente Sectorial de Comunicación, Turismo y Cultura de Venezuela, Jorge Rodríguez.
Los autores pretendían dejar a Venezuela sin luz por varios días. Rodríguez precisó que uno de los implicados fue el senador de Estados Unidos (EE.UU.), por el estado de Florida, Marco Rubio, uno de los promotores de la intervención contra el país suramericano.
Según el vicepresidente de comunicación venezolano, en el ataque también estuvieron asociados el secretario estadounidense Mike Pompeo y el diputado opositor Juan Guaidó.
Asimismo indicó que se trata de un “cerebro electrónico computarizado” donde se regulan las 20 máquinas de la Central Hidroeléctrica, allí se puede evidenciar el aumento de tensión: para mayor carga eléctrica las máquinas aumentan la revolución y, viceversa, a mayor trabajo el sistema indica que debe haber una disminución.
¿Que hizo la población venezolana?
Frente a esta agresión, el presidente Nicolás Maduro llamó a la suspensión de las clases y de las jornadas laborales para el día viernes 8 de marzo. La población venezolana, de manera cívica y en calma, se mantuvo mayoritariamente en casa o se dirigió a plazas y parques cercanos a sus hogares. En Caracas, y pese a que el metro también se vio afectado por el ataque, muchos cuyas jornadas laborales no fueron suspendidas, llegaron a sus trabajos caminando o usando otro método de transporte, en una demostración de voluntad y resistencia ante “la agresión más brutal a la que ha sido sometido el pueblo de Venezuela en 200 años», denunció Rodríguez.
Además, el presidente Maduro compartió en Twitter su admiración «al pueblo venezolano que resiste con gallardía este nuevo ataque de los enemigos de la Patria”.