Una mujer llevó al banco a un anciano muerto, acomodado una silla de ruedas, para intentar retirarle su jubilación, en la ciudad de Campinas, del estado de San Pablo, en Brasil, y fue imputada por la Policía Civil por intentar robar y «faltar el respeto» al muerto.
La acusada fue identificada como Josefa de Souza Mathias, de 58 años, quien negó haber cometido delito alguno en su declaración tomada este viernes por los agentes del Primer Distrito Policial. Sin embargo, ante las pruebas reunidas a lo largo del día, el delegado decidió imputar a la mujer investigada.
Según la Policía Civil, hubo varios testigos como el vecino que acompañó a la mujer al banco, el jefe de seguridad de la sucursal de la entidad y el portero del edificio donde vivía el anciano. Por otro lado, los investigadores afirmaron que le habían solicitado a la sucursal del Banco de Brasil las imágenes de las cámaras de seguridad correspondientes al día de los hechos.
La imputada sostuvo que el banco le había perdido acudir con el dueño de la cuenta, quien fue identificado como Laércio Della Colleta, un jubilado y viudo de 92 años, para realizar la prueba de vida como medida de seguridad y así poder cobrar el importe, luego de que ella supuestamente perdiese la contraseña bancaria.
Cuando la mujer regresó al banco con el hombre fallecido, en un intento de agilizar el servicio, la mujer alertó que el hombre se sentía mal, por lo que llamaron emergencias para que lo ayudaran. Fue entonces cuando descubrieron que el anciano no solo estaba muerto, sino que llevaba fallecido bastante tiempo.
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