El Día Mundial del Agua se celebra cada año el 22 de marzo. Se trata de un día en el que se pretende concienciar a la población mundial de la importancia de uno de los bienes naturales más importantes para nuestra supervivencia, el agua.
Origen
El día 22 de diciembre de 1992 la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró la celebración del Día Mundial del Agua para ser celebrado cada año el día 22 de marzo para recordar a la población mundial lo importante que es el agua para los seres vivos y que pueda llegar a todos los rincones del mundo.
Tema
Cada año para el Día Mundial del Agua es propuesto un tema sobre el que tratarán todas las actividades y actos de ese año:
2006: “Agua y cultura”.
2007: “Afrontar la escasez del agua”.
2008: “Saneamiento”.
2009: “Compartiendo el agua compartiendo oportunidades”.
2010: “Agua limpia para un mundo sano”.
2011: “Agua para las ciudades: responder al desafío urbano”.
2012: “El agua y la seguridad alimentaria”.
2013: “Cooperación en la esfera del agua”.
2014: “Agua y energía”.
2015: “Agua y desarrollo sostenible”.
2016: “El agua y el empleo”.
2017: “Aguas residuales (Wastewater)”.
El valor del agua
Hoy en día existen un gran número de poblaciones a nivel mundial que tienen difícil acceso al agua potable culpable de numerosas enfermedades y pobreza para más de 1.500 millones de personas.
El agua de buena calidad y apta para el uso humano es una parte pequeña de todo el agua que se encuentra en el planeta tierra. Su escasez aumenta drásticamente por el aumento de la población, el despilfarro y la contaminación.
Ahorro de agua
Existen un gran número se medidas que cada persona puede llevar a cabo en su casa y en su vida diaria para contribuir al problema de la escasez y ahorrar agua, como por ejemplo:
Utilizar detergentes ecológicos, sin fosfatos.
Colocar dispositivos de ahorro en duchas y en grifos.
Utilizar plantas autóctonas que necesiten poca agua.
Mantener las cañerías y tuberías en buen estado y sin goteos.
Al poner la lavadora y el lavavajillas hacerlo con la carga llena.
No mantener el grifo de agua abierto cuando no sea necesario.
Realizar una ducha en vez de un baño ahorrará 150 litros de agua.
Descongelar los alimentos a temperatura ambiente y no bajo el grifo, se ahorrará de este modo 15 litros.