Enfermarse en Junín siendo afiliado de PAMI, capitar en el Hospital, tener que internarse y para ello hasta llevarse las sábanas, no es el mejor de los cuadros a los que hacer frente. Más aún cuando en días sofocantes como los que se viven con esta intensa ola de calor, también se depende del ventilador que una compañera de habitación llevó desde su casa.
Pareciera que el confort en una internación es apenas un detalle, cuando en realidad no lo es. Pero mucho más grave es si se debe sumar otro problema que es el que motivó la internación. Lorena lleva seis días internada y desde entonces espera que un especialista resuelva su cuadro médico, cansada por la espera, tomó contacto con Junin24 para que se haga público su problema.
“Estoy internada en el hospital desde el miércoles pasado. Me tienen que operar pero todavía no apareció el médico” comienza explicando Lorena Paola Pereyra, quien con apenas 40 años atraviesa por un doloroso problema de salud.
Por ser afiliada al PAMI y su cápita corresponder el Hospital Piñeyro, es que allí la atienden.
Recordó que primero, “estuve 20 días viniendo a la guardia –del HIGA- , y me mandaban a mi casa. Tengo una hernia de cadera y me tienen que operar pero todavía no se presentó el cirujano”.
Cabe remarcar que Lorena se encuentra internada desde el miércoles de la semana pasada, en la habitación 310 del tercer piso del centro de salud público y al especialista que debe verla “lo están pidiendo desde el miércoles y no viene” explica, para agregar que no consigue que la atienda “el director del Hospital, que supuestamente no es más Meneses. Llamo al teléfono que me dieron y no atiende nadie. Me dieron otro número, llamé y me dijeron que era equivocado. Llamé al PAMI porque estoy afiliada y capito en el Hospital…y acá me tienen…todavía…sigo sin poder pararme”.
Postrada en una cama, sin siquiera poder bañarse, especificó que tiene una “hernia de disco que está tocando un nervio de la pierna izquierda y no me permite caminar”.
PASO A PASO
El relato de Lorena se produjo en horas de la mañana y ya cerca del mediodía tomó contacto con Junin24 nuevamente, para explicar que un cirujano –no el mismo que estaba siendo convocado desde el miércoles pasado-, “vino –a la habitación-, dijo que me tienen que operar, pero no acá, porque no tiene los insumos para trabajar y tengo que hacer primero el cambio para una clínica”.
Para ello, “llamé a PAMI y me dieron que tengo que pedir el papel de rechazo conformado primero y después hacer el pase para capitar –en el centro de salud privado- y que recién ahí mandarían a pedir las cosas que se necesitan para operarme de la cadera”.
Ahora, los días se siguen sucediendo porque “acá en el Hospital no hay nadie como para pedir la documentación. No está el director” y “tendré que esperar hasta las 10 de la mañana que es cuando vienen y se van a las 12”.
La síntesis es simple. Lorena tiene 40 años, es afiliada a PAMI, capita en el Hospital, el médico que debía atenderla para resolver su cuadro médico con una cirugía nunca llegó.Lleva días aguantando un dolor insoportable, ni siquiera puede ponerse de pie, menos aún darse una ducha.
Está encerrada en una habitación de hospital, en una cama que tuvieron que tenderle con las sábanas que llevó de su casa. Con una temperatura que supera ampliamente los 35 °, gracias a su compañera de sala recibe un poco del aire que despide un ventilador de pie porque el centro de salud no lo brinda.
Y mientras tanto, a medida que pasan los días, trámites y más trámites que obviamente ella no puede realizar.
