Si dejamos pasar de largo algunos focos de conflicto entre las hinchadas, lo mejor desde el inicio del partido hasta que el árbitro hizo sonar el silbato que puso fin al primer tiempo estuvo en las tribunas. Y si fue así, hubo mucho mérito del equipo que conduce Israel Damonte para contener a Boca, incomodarlo, hacerle sentir que a Junín no se viene de paseo.
Pero si el Xeneize ha tenido una costumbre a lo largo del torneo es la de sacar agua de las piedras. La de sacar máximo provecho a lo poquito que genera. ¡Y después señalan a Sarmiento! Es verdad que primero Marcos Rojo falló un penal. Mejor dicho, que Sebastián Meza salvó al Verde con otra de esas atajadas que ya tiene como marca registrada. Pero en plena crecida anímica de Sarmiento, con Rojo ya reemplazado por Roncaglia por lesión, Boca encontró de contragolpe, ¡sí, de contragolpe! el gol que le permitió abrir el marcador en tiempo de adición.
Medina salió disparado desde su propio campo, cruzó mitad de cancha y evaluó sus opciones. Decidió abrir hacia la izquierda para Benedetto, que de primera metió un centro rasante que ubicó perfectamente habilitado a Langoni, ingresando solo por el borde del área chica para definir ante la salida de Meza y poner el 1-0 con que se cerró la primera mitad.
En el complemento, El Verde fue en busca del empate con el impulso de su gente, pero Boca también fundamente su liderazgo desde el arco y entonces apareció la figura de Agustín Rossi, que a nueve minutos del final le negó la igualdad a Checho Quiróga. Y el que terminó haciendo el tiempo que tanto le han reprochado a Sarmiento fue el Xeneize. «Un minuto por cada lateral», protestó Damonte minutos antes que Zambrano se tumbara en el piso para que ingresaran a atenderlo vaya uno a saber de qué dolencia.
Con siete minutos de adición, quedó tiempo para dos buenas intervenciones de Meza, primero ante Romero y después ante el pibe Javier Morales. Pero especialmente para un tiro de esquina que puso a sufrir a todo Boca y en el que el propio Meza fue protagonista en el arco de enfrente, con una volea sensacional que Rossi despejó al córner de igual manera. Ganó Boca. Haciendo un gol y mucho tiempo.