Son cada vez más numerosas las personas comprometidas que se resisten a pensar que ante la inseguridad nada se puede hacer más que esperar que actúen las fuerzas de seguridad y la justicia.
Un ejemplo es lo que ocurrió en la mañana de hoy entre los barrios Ferroviarios y FONAVI.
Eran cerca de las 11 cuando una vecina sacó a pasear a sus mascotas.
De pronto dos adolescentes que tendrían entre 13 y 15 años y se trasladaban caminando, se le acercaron y preguntaron si no quería comprar un perro.
La actitud de los menores, el hecho que llevaran a la mascota en una mochila, le llamaron la atención por lo que les preguntó por qué lo vendían. La respuesta no se hizo esperar. Le dijeron que la madre tenía que “pagar el alquiler” y necesitaba dinero.