El automovilismo histórico volvió este fin de semana a nuestra ciudad, con diversas actividades organizadas por la Agrupación Eusebio Marcilla y con el acompañamiento del Gobierno de Junín. La figura de Eusebio Marcilla y su recuerdo, hicieron que se vivieran momentos de mucha emoción, previa a la largada de la carrera de regularidad que se llevó a cabo el domingo por la mañana.
Las actividades que se realizaron fueron para homenajear al Automoto Club Junín por sus 70 años de vida y recordando los 50 años de la carrera de Turismo Carretera que se corrió en Junín, que la ganó Juan Manuel Bordeu, que a su vez salió campeón argentino de ese año y fue la única coupé que ganó un campeonato de turismo carretera. También se celebraron los 30 años del primer rally que organizó la agrupación «Eusebio Marcilla» y que ganó Gastón Perkins.
Para Daniel Pueyo, esta «fue una jornada muy especial. Desde comienzo de años que veníamos trabajando con la gente de la agrupación Eusebio Marcilla porque no podía ser que Junín no tuviera su copa de automovilismo histórico, afortunadamente lo pudimos concretar, de manera conjunta y ha sido un fin de semana excelente».
«Hoy vemos que muchos jóvenes participando y eso nos va a servir para seguir trabajando y lograr que el automovilismo histórico siga creciendo en nuestra ciudad», concluyó el funcionario.
Edmundo Marcilla, por su parte, dijo que «esto es una pasión y poder compartirlo con los pocos que quedan de esa época es muy lindo y gratificante. La amistad es lo que sobresale en este tipo de eventos, eso es lo que siempre brindó el automovilismo. Para nuestra agrupación este fin de semana fue muy lindo, gracias al Gobierno de Junín, especialmente a Daniel Pueyo con trabajamos intensamente para que todo saliera como salió».
Consultado sobre la convocatoria, Edmundo Marcilla sostuvo que «Junín es especial, porque aquí está grabado el nombre de Eusebio, y eso es un gran atractivo para los que vivieron y sienten pasión por el automovilismo histórico. Hay amigos de la la localidad de Morteros que nos visitan por primera vez y nos decían que no querían morir sin dejar de conocer la tierra de Eusebio Marcilla, quien nos dejó un camino bien marcado que tenemos que seguir».
Hugo Sanchez, copiloto de Juan Manuel Bordeu, expresó sentirse «muy contento y agradecido por la invitación», y recordó que «cuando corrimos con Juan Manuel aquí ganamos, eso me trae muy lindos recuerdos. Nuestra pasión sigue intacta porque cuando uno lo vive no puede dejar de vivirlo como una pasión, a pesar de los años. Estar en la tierra de Eusebio también es muy fuerte, porque también uno tiene los mejores recuerdos».
Por último, Ruben Miano y Edgar Miano, son padre e hijo, respectivamente de la localidad de Morteros, Provincia de Córdoba, y expresaron que «siempre amamos las cupecitas y hemos participado de muchas carreras, esta pasión se trasmite de generación en generación». También destacaron lo importante y emocionante «que es estar en la tierra de Eusebio Marcilla, hicimos un gran sacrificio porque queríamos estar en Junín, yo recuerdo muchos a esos grandes pilotos y Eusebio, además, fue un ciudadano ejemplar y para nosotros es un recuerdo permanente».