Veinticuatro horas después de la masiva marcha de protesta a Plaza de Mayo, el gobierno de María Eugenia Vidal convocó hoy a los gremios docentes a retomar las negociaciones salariales el próximo martes en una mesa técnica que se desarrollará luego de que caduque la vigencia de la conciliación obligatoria, si es que el ministerio de Trabajo no prolonga esa medida.
Unas horas antes de que el gobierno llamara a la nueva reunión, las organizaciones del Frente de Unidad Docente (FEB, SUTEBA, UDA, AMET, SADOP y UDOCBA) habían ratificado que continuarán con acciones de protesta en cada uno de los distritos, pero por ahora se abstuvieron de llamar a nuevos paros, en la misma tesitura que la confederación nacional, CTERA.
Se suman así señales de ambas partes de afianzar la voluntad negociadora que, según el gobierno y los gremios, se expresó el lunes pasado en una reunión de mesa técnica en la cual el gobierno reconoció que hubo pérdida del poder adquisitivo del salario en 2016 y a la que los gremios accedieron a enviar representantes aunque se realizó en plena vigencia de la conciliación obligatoria, medida cuya legitimidad desconocen.
De todos modos, hoy el gobierno nacional, a través de su ministro de Educación, Esteban Bullrich, volvió a ratificar que no llamará a una paritaria nacional, un punto que los gremios han considerado, al menos hasta ahora, innegociable. Bullrich consideró “obcecada” esa negativa a negociar salarios solo en las provincias y reiteró que el sueldo mínimo nacional se estableció en el salario básico más el 20 por ciento.
De todos modos, el funcionario dejó abierta la posibilidad de retomar la discusión con la confederación nacional de docentes, aunque sin tocar la materia salarial. “Quiero seguir trabajando con los gremios, quiero seguir recibiendo sus aportes, construir con ellos ese sistema que sea uno de los mejores del mundo”, dijo Bullrich. Podría ser la antesala de un llamado a discutir cuestiones como las condiciones de trabajo.
El ministro (único funcionario en referirse al conflicto, en medio de un silencio de sus pares provinciales que buscan evitar interferencias que complique la reunión del martes) se quejó de que «seis días de paro nacional es más que lo que le hicieron al kirchnerismo en 12 años que dejó el salario docente en 5.600 pesos» y ratificó que, desde Nación, «se triplicaron los fondos para las provincias respecto de 2015».
Más allá de esas críticas, se especulaba que los gremios envíen a sus representantes el martes, sobre todo porque se trata de un encuentro que se realizará una vez concluida la conciliación y en el que se espera que el gobierno presente una nueva –y mejorada- propuesta de aumento, en vistas de que hace una semana reconoció las dificultades con el salario el año pasado, un punto que no estaba reconocido en las propuestas que ha hecho hasta ahora, todas las cuales fueron rechazadas.