La dirección de Medio Ambiente del Gobierno de Junín, a cargo de Perla Casella, continúa trabajando en el control del barigüí, con el fin de disminuir la población y evitar molestias a los vecinos del Partido.
Las aplicaciones se llevan a cabo una vez por semana, tanto en las márgenes del Río Salado (para controlar las larvas), como en los espacios verdes, en los que se ataca a los ejemplares adultos.
«Durante todo el año hicimos aplicaciones una vez por semana, para tratar de mantener el equilibrio y lograr tener la mínima cantidad de barigüí posible», afirmó Casella.
La funcionaria contó que para la realización de las tareas el municipio adquirió nuevos equipamientos, tales como una termoniebla para la aplicación aérea y un bote para el trabajo en el río.
Por su parte, la especialista Cecilia Laffaye expresó: «Las acciones son siempre tendientes a atacar dos estadíos de este ciclo biológico: uno es la larva, que es lo que se está haciendo hoy; y otra es la fumigación del adulto, con esta máquina nueva que se compró, la termoniebla. Son dos formas de atacar».
«Hoy están haciendo la aplicación en el río. Esto es progresivo en el tiempo y la ciudad se va a ver muy favorecida, porque seguramente va a bajar la población de bariguí», agregó.
En otro orden, Laffaye aclaró que la plaga de barigüí no se puede exterminar, pero sí controlar de manera efectiva: «Cuando se trata de plagas es muy difícil hablar de exterminio. Siempre la idea es controlarlo y tenerlo siempre por debajo del umbral de daño y de molestia. En eso hay que hacer mucho hincapié, para no generar falsas expectativas».
Finalmente, dijo que los vecinos pueden colaborar con el gran trabajo que lleva adelante el Ejecutivo, limpiando y desmalezando los lotes.
«El adulto siempre va a estar refugiado en la vegetación, en la maleza y en los pastos altos. Así que sería muy bueno si pueden contribuir de esta forma. Esa es una gran ayuda que los vecinos nos pueden dar a nosotros», sostuvo.
