El Gobierno bonaerense ordenó acortar una semana las vacaciones de invierno y prorrogar el calendario escolar en diciembre para recuperar los días de clases perdidos por los paros, una medida que cada establecimiento escolar deberá cumplir de acuerdo a la cantidad de medidas de fuerza que haya sufrido.
A través de la resolución 1131/17, firmada por el director general de Cultura y Educación bonaerense, Alejandro Finocchiaro, se aplicará un esquema de recuperación de clases para asegurar el cumplimiento del calendario escolar de 180 días.
En aquellas escuelas en las que hubo hasta cinco días de paro las clases se recuperarán la primera semana del receso invernal. En tanto, los establecimientos que tuvieron entre seis y diez medidas de fuerza deberán agregar además días de clase durante las jornadas institucionales, período en el que usualmente los edificios permanecen cerrados a los alumnos.
La medida, que se conoció a través de los medios de comunicación capitalinos, es resistida por los gremios docentes y fue rechazada por la mayoría del Consejo General de Cultura y Educación, un organismo consultivo integrado por dirigentes del oficialismo, la oposición y los gremios, cuyas decisiones, no obstante, no son vinculantes.