Al salir a robar, no es cuestión de dejar marcas de pisadas o huellas dactilares. Menos aún actuar con el rostro descubierto por si hay cámaras. Y parece que el delincuente que ingresó en la firma Oroza, lo tiene claro.
El ladrón “la tiene re clara”
Guantes, cara y cabeza cubierta con cuello y capucha, guantes y bolsas en los pies.
Actuó sólo, se movilizaba en moto y así trasladó todo lo que logró robar. Alargue, hidrolavadora, olladora, bordeadora y motor inflable.
Y si bien intentó no quedar registrado en cámaras de seguridad del local cubriéndolas, no le salió del todo como lo debe haber planeado.
Se habría establecido que el robo perpetrado el miércoles se registró pasadas las 23 horas tal como lo muestran las imágenes.
Para acceder al predio, el delincuente solitario procedió a romper un alambrado perimetral y ya en el lugar para apoderarse de algunos elementos también barreteó la puerta de una dependencia.
La sorpresa desagradable se la llevarían en la mañana de hoy, pasadas las 7:30, cuando se iniciaba la jornada laboral.
Concurrió personal policial y la denuncia fue radicada en Comisaría.
La causa por robo recayó en la fiscalía de turno del Departamento Judicial Junín.