Este jueves, compañeros de Elsa Calzetta y funcionarios de la Municipalidad de Junín realizaron una emotiva despedida a la trabajadora municipal que desempeñaba funciones en la Biblioteca Municipal
Emotiva despedida a empleada municipal de Junín que se jubiló
No alcanzan los adjetivos calificativos para describir el momento que se vivió este jueves en Rivadavia 20, donde funciona la Biblioteca Municipal, lugar en el que hasta el día de la fecha Elsa Calzetta sirvió a la comunidad de Junín. Sus compañeros, al grito de Elsita y golpeando una pizzera de aluminio la acompañaron a realizar la última marcación en el edificio municipal en un clima festivo y alegre.
La palabra, en primera persona, de la protagonista
Gracias a la generosidad de sus compañeros, Junín24 obtuvo declaraciones de Elsa quien comenzó su relato, haciendo una aclaración: «Mi nombre es Elsa Lucrecia Calzetta, y les digo mi segundo nombre porque en Bahía Blanca tengo una tocaya que se llama Elsa Calzetta también. Comencé a trabajar en la Biblioteca Municipal el 1° de septiembre de 1991, con apenas 24 años. Así fueron pasando los días, los meses, los años. Trabajando he encontrado personas maravillosas (y otras no tanto), pero bueno, siempre me quedo con lo bueno. Y así pasaron los años. ¿Cómo me preparé? . Cuando en el 2016 el convenio colectivo de trabajo en el artículo 74 y 75 decía que te podías retirar con 33 años de antigüedad, y 58 de edad, desde ese día hasta la fecha esperé con ansiedad este día. Así que llegó! Como resumen, podría decir que aprendí muchísimo, llegas con un bolsito y te vas con una valija de conocimientos, es increíble cómo uno se va desarrollando con el tiempo», reflexionó.
Feliz por la despedida que no se esperaba
«Estoy feliz por esta despedida – asegura Elsa – no me la esperaba, realmente. Me encantó! Feliz! Gracias, gracias, gracias! Despedida de la cual son responsables sus compañeros, como Carla Gómez, por ejemplo, que contó a Junín24 que «a mi me recibió tan bien cuando vine acá. que lo mínimo que podía hacer, es ponerle todo mi empeño para acompañarla en su despedida, la que esperó tanto tiempo!!! Le pinté la chaqueta, le encargué el mate personalizado.. qué se yo, quería que sepa que estamos estamos felices por ella.
Rosario Ortega también aportó su testimonio a Junín24: «Desde mi primer día puse todo mi énfasis en la biblioteca, sabiendo que Elsita me iba a enseñar todo lo que en este corto tiempo aprendí! Siempre predispuesta y haciéndome parte de su lugar !! Transmitiendo calma y seguridad, que todo va a estar bien!!!.
Iván Guajardo hace memoria y también aporta lo suyo: «Cuando yo conocí a Elsa, los dos éramos muy jóvenes, teníamos 23 años menos, fue a finales del 2001 cuando yo ingresé, una época muy particular. Compartíamos el horario de la mañana en la biblioteca, yo recién había cumplido 20 años y estaba empezando. Estaban Elsa, desde 1991, y Patricia, y había otras personas. Me recibieron muy bien, aprendí un montonazo. Nos empezamos a conocer, compartíamos el desayuno, y leían el diario en vos alta, y todos participábamos de la lectura del diario y lo comentábamos entre todos», cuenta Iván entre otros detalles que Elsita tuvo para con él.
«Siempre me gustaron los libros y la lectura – cuenta Cindi Crespo – pero Elsi me enseñó el respeto y la pasión por estos, la importancia y el valor. Me encamino en el mundo fantástico de la escritura. Agradezco el conocerte, te quiero Elsi y feliz vida!!.», le desea.
«Yo a Elsa la conocí en 1990 cuando empezamos a estudiar Bibliotecología – recuerda Laura Gelari – en el instituto que funciona en el edificio del Colegio Normal, y ahí cursaba ahí también con nosotras Patricia Zabala. Las tres hicimos la carrera juntas y nos recibimos las tres juntas. Elsa entró a trabajar primero y al año siguiente entré yo al Museo de Arte. En los años 90 hicimos varios viajes juntos, fuimos a las Cataratas y con otras amigas fuimos a Brasil. Recuerdo también juntadas, cenas. Si bien la vida te va llevando por otros lados, siempre fuimos amigas».
Por último, y reiterando su presencia en esta nota, cierra Carla Gómez: «Elsa.. llegó tu último día laboral, el que tanto esperaste!!! 😃 33 años de rutina, de acomodar fichas según el criterio de gente que estuvo de pasada. ,y no tengo dudas que siempre fue con el suspiro profundo y el empuje con el que te conocí!! Fueron 33 años de compartir, entre mates o agüita fría, charlas profundas y descontracturadas, metas personales, logros, algún que otro bajón.. y todo eso, se dio en el día a día.
Un torbellino de sensaciones vas a tener hoy, los días siguientes y hasta en algún momento, creo que alguna de otra charla «bibliotequera», extrañaras! Por mi parte, quiero agradecerte por haberme recibido como lo hiciste, entendiendo que los cambios de área, en general, vienen con un trago amargo detrás..
De corazón, deseo que disfrutes a pleno este merecido descanso. Te dejo un fuerte abrazo, un par de palabrotas que invitan al chiste y un: «estoy de este lado, si algún día pinta matecitos o birrita» 😉 Gracias Elisita querida.. A REVOLEAR LA CHANCLETAAA!!!!!