El que mayor trascendencia tomó en las últimas horas fue el robo en las instalaciones del Club Newbery (Ver nota aparte) pero lamentablemente no fue el único cometido durante la última jornada, si de robos cometidos cuando en los domicilios no hay habitantes circunstancialmente. Los delitos cometidos bajo la modalidad conocida como “escruche” no se detienen. Y ya se ha perdido como característica que se producían en verano aprovechando a las familias que podían estar de vacaciones o que optaban en días de elevada temperatura, concurri a una pileta o a la laguna, dejando sus casas sin moradores. Se producen a toda hora del día en viviendas particulares, entidades deportivas, locales comerciales y hasta en merenderos.
EL PRIMERO DEL DÍA
Apenas unos minutos son suficiente para delincuentes que “no dejan escapar” una oportunidad para meterse en propiedades en las que presuntamente no hay moradores. Es lo que le ocurrió a una familia cuyo domicilio se encuentra en las inmediaciones de calle Dulbecco entre Avda. La Plata y Suipacha. Apenas comenzaba la mañana cuando por poco menos de media hora, se ausentaron de su casa.
Cuando a las 7 uno de los integrantes retornó, ya le habían barreteado la puerta de acceso y le habían sustraído al menos un televisor.
También en la mañana de hoy, autores hasta el momento ignorados, en un merendero del barrio Los Totoreros forzaron una abertura y se llevaron una motosierra. Otra víctima del accionar delictivo fue la quinta de un conocido deportista local al que, aprovechando que no había nadie, le sustrajeron aberturas de aluminio. De este hecho en particular, si bien no hubo información oficial, trascendió que los “rateros” habrían vendido los objetos en un comercio de compra venta.
Algunos de los delitos referidos fueron denunciados por cuanto se estima que las causas serán giradas a la fiscalía de turno, pero hay cierto desánimo en los ciudadanos que resignados y pensando que no le darán una respuesta, optan por no acercarse a una dependencia policial. Más allá del tiempo que se considere “perdido”, no debería dejarlo pasar, al menos para que se pueda trazar un mapa del delito y se refuercen las zonas más complicadas.
