Cuando en Junín se comenzó a trabajar en la sanción de la ordenanza que regula el uso y la comercialización de pirotecnia sonora, muchos sectores, además de impulsarla salieron a respaldarla, precisamente por el efecto negativo que generan estos productos en personas como ex combatientes de Malvinas, niños con Asperger e inclusive, los grupos de proteccionistas, quienes también informaron sobre el trastorno que genera en los animales.
Consultados sobre la vigencia de esta ordenanza, ex combatientes expresaron su opinión, destacando el beneficio que genera en muchos de ellos que cuando escuchan una explosión «hay muchos compañeros que para estas fechas no salen, porque les recuerda los bombazos de Malvinas».
Bruno contó que «en ciudades del sur, donde la guerra si vivió más, hace tiempo está reglamentado y prohibido el uso de la pirotecnia sonora. Por ejemplo, en Río Grande y Ushuaia, desde el año 2005 está prohibido, allí se sancionó una ley impulsada por los ex combatientes». También destacó que «en Junín, además de nuestra situación, también se tuvo en cuento a los chicos con Asperger, opinaron los proteccionistas, por eso creo que esta ordenanza está muy bien y la hemos apoyado».
Por su parte, Sergio Herrera, también ex combatiente de Malvinas, señaló que «estamos hablando de recuerdos muy fuertes, que hacen que en lugar de disfrutar de las fiestas muchos veteranos pasen un mal momento, recordando cosas que hace 35 años tratamos de sacarnos de la cabeza. Los festejos fin de año, los primeros años después de la guerra fueron muy difíciles para nosotros y con el paso del tiempo, algunos pudimos superarlo y muchos no».
Cuando se le solicitó que enviara un mensaje a los vecinos de Junín, Sergio expresó: «Uno trata de evitar algunas circunstancias, prefiere no decir nada y poner la cabeza en lo que vivimos y olvidar lo que sufrimos, pero sí le pido al vecino que trate de evitar el uso de pirotecnia sonora porque le hace mucho mal a mucha gente y que se puede festejar igual sin perjudicar a nadie».