Todo lo que se había planificado, todo lo que se había esperado fuese una fiesta desde que el sorteo arrojó que habría duelo entre Sarmiento y Douglas Haig por los treintaidosavos de final de la Copa Argentina, se terminó demasiado rápido.
La jornada ya se había iniciado con una intensa lluvia, que sin embargo el campo de Quilmes parecía lograr asimilar para que la pelota comenzara a rodar. ¡Y rodó!
En 12 minutos de partido, Pablo Magnin hizo celebrar a los hinchas que no se bajaron por el agua con el tanto que abrió el marcador en favor de los dirigidos por Iván Delfino.
Pero habría tiempo para poco más y el árbitro decidió a los 20 minutos que ya no se podía jugar en esas condiciones, por lo que decretó el final de un encuentro se reanudará mañana, desde las 17.
