Escribe Cristian Mémoli- estudiante de Derecho -, para Junín24
«No existían aún novedades en el caso Marcontognini -recordemos, acontecido el 1 de Junio de 1997- cuando la ciudad se vio nuevamente aturdida por la muerte de un vecino ultimado a golpes dentro de su domicilio. Menos de tres meses habían transcurrido desde la muerte del primero cuando fue encontrado asesinado Amilcar Rocha el día 31 de agosto de 1997, y al parecer con un modus operandi muy similar al del caso anterior .
Fue su hermano quién lo encontró muerto en su cama, lo habían matado golpeándolo en la cabeza con una pala de su propiedad. Las primeras horas de la investigación fueron de desconcierto y estupor, sin embargo los vecinos fueron aportando datos a los investigadores. Posteriormente y mediante un estudio de ADN realizado en base a cabellos encontrados en la mano de Rocha, la investigación dio un giro positivo al coincidir este estudio altamente con el perfil genético del sospechoso principal del homicidio. Sin embargo, nunca fue detenido, y además nunca se llegó al Juicio Oral.
Otra cuestión que no pudo dilucidarse nunca fue móvil del homicidio: Nada faltaba en el humilde domicilio de la víctima. No se sabe porqué lo mataron. Se podría decir que el caso de Amílcar Rocha fue el que más consiguió avanzar en materia de investigación, sin embargo la causa quedó envuelta en un gran misterio al no resolverse nunca. Prescribió en el año 2012».