El Gobierno de Junín continúa trabajando para revertir los daños ocasionados por la acumulación de agua, producto de las intensas lluvias registradas durante los últimos días.
En primer lugar, los operarios trabajaron en el camino rural que conduce a la localidad de Agustín Roca, cuyos caños de desagüe se vieron socavados y debieron ser reemplazados.
Las acciones en la zona comenzaron a realizarse el jueves 23 de diciembre y continuaron durante varios días, incluyendo el día de Navidad, en el que los empleados municipales prestaron servicios hasta pasadas las 22.
Otro de los sectores intervenidos fue el barrio Los Perejiles, en donde se llevaron a cabo trabajos de zanjeo y se colocaron dos bombas: la primera, en la intersección de la ruta 188 y avenida Libertad y la otra en el cruce de esa ruta y la avenida La Plata.
Lo mismo ocurrió en el barrio San Ignacio, en el que también se realizaron las acciones necesarias para escurrir el agua acumulada.
“Allí estuvimos trabajando todo el día 25. Pusimos una bomba para desviar el agua y así aliviamos la situación de los vecinos que se habían inundado”, afirmó Néstor Scollo, director de Equipos Viales Urbanos y Suburbanos.
Además, en el transcurso de la semana, los operarios comenzaron a trabajar en el Barrio Real, en donde este lunes se colocarán nuevos caños.
“Hay barrios que tienen mucha pendiente, corre mucho el agua y por eso se han inundado. Desde el Gobierno de Junín salimos a trabajar de manera inmediata, aunque sabemos que esto lleva tiempo”, agregó Scollo.
Finalmente, el especialista mencionó el operativo montado en el Parque Natural Laguna de Gómez, en donde, tras la tormenta del 25 de diciembre, se registró la caída de numerosos árboles y grandes gajos que debieron ser removidos.
