En un domingo que estuvo a punto de irse a la banquina, la Selección de Junín encendió la chispa del fuego sagrado y se llevó una victoria 2-1 como visitante de Olavarría, con goles de Melina Garialdi y Juana Garayalde, en el partido de ida de los cuartos de final del Torneo Provincial.
Para decir que el triunfo que la Selección de Junín consiguió en su visita a Olavarría fue el más significativo en lo que se lleva disputado del Torneo Provincial no alcanza con mirar un resultado y poner foco en la instancia. Ni siquiera con darle vueltas al desarrollo del juego pensando en qué se pudo hacer mejor y qué decisiones, adentro y afuera de la cancha, fueron acertadas. No existe partido sin contexto. Pero por momentos, este domingo el contexto se comió al partido.
Puesta en marcha la aventura en pleno y veraniego mediodía, las jugadoras de La Sele llegaron a destino después de más de cuatro horas de viaje, con parate obligatorio a un costado de la ruta por desperfectos técnicos; agobiadas por la falta de aire acondicionado y asustadas por un par de maniobras temerarias. Protestarlo no es capricho. Es poner sobre la mesa una realidad de la que todas las partes ya tomaron nota para que no se repita en el futuro.
No existe partido sin contexto y el de Las Fortineras empezó condicionado por la previa. Lejos de haber terminado al besar tierra firme con gustito a caucho, la odisea continuó en el sintético del Club Embajadores, porque el seleccionado local hizo mucho mérito para complicar todavía más los eventos. Pese a no apostar al juego de posesión sino a los lanzamientos directos, salteando líneas y confiando en la velocidad de una Karen Bargas que lastimó desde los extremos, Olavarría plantó bandera en campo juninense. El esperado debut de Pini Tamburrini, entonces, fue mucho más incómodo de lo que cualquiera hubiese imaginado, porque por momentos le tocó más correr la pelota que tenerla. Lo mismo sucedió con Gisela Susi, la otra debutante de la tarde, que sufrió en exceso a sus espaldas durante la primera mitad.
Rafaela Carbone tuvo que jugarse el cuerpo para salir a cortar dos acciones de mano a mano, primero en una jugada que quedó invalidada por una clara posición adelantada; después con una pérdida en mitad de cancha que le permitió a Daiana Leonardo poner a correr a Bargas, a la que la uno juninense llegó a desviarle la pelota en la carrera para contar luego con la colaboración de la propia Chicho Susi, que sacó sobre la línea un remate con poco ángulo que buscaba red. La siete bravísima de Olavarría lo tuvo también a la salida de un tiro de esquina, con un cabezazo que tras un leve desvío salió por arriba del travesaño. La primera respuesta de La Sele llegó tras una pelota que peleó y ganó Sofía Borsalino y que derivó en Juana Garayalde para sacar un remate de primera que tapó bien Nabila Rahal sin dar rebote.
En un tiro libre con gran ejecución de Daiana Leonardo, por la potencia que le dio a la pelota rumbo al arco en un golpeo seco, Olavarría puso el marcador a su favor con la certeza, de un lado y del otro, de que había merecido hacerlo. Junín era demasiado largo para atacar, pero a la vez quedaba demasiado lejos de su propio arco cuando le tocaba retroceder con urgencia. Y como si no quedaran imponderables que jugaran en contra, un aro de Juana Garayalde se negó a abandonar la oreja pese al pedido arbitral, sacándola de la cancha durante más de cinco minutos. En ese lapso llegó, sin embargo, el primer y bendito guiño del destino. Con una jugadora menos, Pini hizo de Pini incluso cuando estaba peleándole al fastidio de sentir que el partido no se estaba dando como lo había imaginado al momento de decidir volver. Y entonces ubicó a su socia, Melina Garialdi, adentro del área para que de primera y casi cayéndose esta llegara a puntear para vencer a Rahal poniendo un empate que ofició también de descarga.
No existe partido sin contexto y el del segundo tiempo invitaba a que Las Fortineras sacaran máximo provecho al envión anímico que significaba haber cobrado un premio demasiado grande. Y en Olavarría rondaba la sensación de haber obtenido demasiado poco después de hacer el desgaste. Había que aprovechar las señales, entonces Yamila Astrada anticipó en mitad de cancha y metió el centro desde la derecha. Tras un rechazo defensivo, la pelota cayó a los pies de Juana Garayalde, que no tardó en armar su disparo desde el borde del área exigiendo una gran reacción de la arquera local para sacar al córner.
El cuerpo técnico encabezado por Diego Carpinella comenzó a proponer variantes que, a diferencia de partidos anteriores en que los ingresos tardaron en acoplarse al ritmo de juego, funcionaron a la perfección. Jalo Fredez y Belén González formaron buen tándem cuando se encontraron sobre banda derecha, Micaela Navone fue rueda de auxilio para Pini Tamburrini; Mercedes Cattenazzi tuvo desborde y voz de mando; y Marcela Román ayudó a que si todavía no se encontraba la fluidez deseada, al menos se dejara de sufrir.
Olavarría tuvo de todos modos sus opciones, con un remate de Rocío Sosa que tapó Rafaela Carbone en dos tiempos y con una definición de emboquillada de Bargas que también se quedó en las manos de una Rafi que sabe hacerse gigante. Junín respondió con un buen encuentro entre Jalo y Belén González, para que esta sacara un centro que Mercedes Cattenazzi llegó a definir tan exigida que terminó impactando con la panza, de anticipo, mandando la pelota afuera. Y para que la odisea juninense pueda contarse con aires de leyenda a las nuevas generaciones que se pondrán la camiseta de La Sele, en tiempo de adición Chela Román agarró la lanza, cruzó mitad de cancha y ubicó a Mercedes Cattenazzi sobre la izquierda, para que esta pusiera una marcha más y se metiera al área encontrándose una pierna que la detuvo en el camino con inevitable destino de penal. Juana Garayalde relojeó si alguien más quería hacerse cargo de un momento tan pesado, pero recibió como respuesta el gesto de confianza que la convenció de ser ella la que se encargara de ubicar la pelota pegada al palo y sentenciar que sí. Que es hermoso ganar así.
ASÍ FORMÓ JUNÍN
Rafaela Carbone; Gisela Susi, Romna Paye, Jennifer Garayalde, Yamila Astrada; Yolanda Silva, Ludmila Reynoso, Antonela Tamburrini, Juana Garayalde, Sofía Borsalino; Melina Garialdi. Suplentes: Dianela Carballo, Marcela Román (X Je. Garayalde), Ayelén Silva, Jael Fredez (X Silva), Micaela Navone (X Reynoso), Belén González (X Garialdi), Mercedes Cattenazzi (X Borsalino). CT: Diego Carpinella, Lucio Cannarozzo, Marisa Martínez.
ASÍ FORMÓ OLAVARRÍA
Nabila Rahal; Maira Díaz, Jorgelina Peralta, Milagros Berho, Lourdes Cavalleri; Rocío Sosa, Belén Boyer, Daiana Leonardo, Milagros Velo; Karen Bargas, María Luz Bulant. Suplentes: Lucrecia Hurtado, Iara Niz, Brisa Latorre, Florencia Manetti, Sofía Ortíz, Brenda Leguizamón. CT: Claudio Pinedo, Marina Reyes.