Con el pueblo ingresado en la Fase 5 de la cuarentena y después de solicitar los permisos correspondientes a la Dirección de Deportes del Municipio, el preparador físico de Sarmiento de Junín Federico Coronel comenzó a trabajar de manera personalizada con las tres toldenses que integran el plantel: Sofía D’Ambrosio, Brunella Gutiérrez y Sofía Nieves.
En diálogo con Junín24 Fútbol Femenino, el profe explicó que las jugadoras que pasaron en Los Toldos el momento más duro de la pandemia fueron privilegiadas, porque incluso antes que se ingresara a Fase 4 ya podían tener salidas recreativas, como caminatas, una hora por día. «Después se fue flexibilizando. Entramos a Fase 4, Fase 5 y fueron habilitándose más actividades. Fútbol no. En Fase 5 hablaron con los clubes diciendo que en grupos de hasta 10 personas, siguiendo protocolos, podían entrenar. Pero los clubes siguieron la directiva de AFA, que dijo que no, para evitar sanciones futuras», contó.
Y agregó: «Yo me acerqué a Deportes para preguntar si podía trabajar personalizado con las tres jugadoras de Sarmiento. Me dijeron que sí, siempre que no compartieran ni materiales, ni colchonetas. Cada una lleva su agua, yo tengo que estar con barbijo. Pelota en principio no nos dejaron; pero después nos dijeron que si cada una llevaba la suya sí podían entrenar. No queda más que hacer trabajos de conducción, de técnica individual. Pases, por ejemplo, no podés hacer».
Más allá de las limitaciones del caso, los nuevos permisos fueron un gran incentivo para las jugadoras que, según reconoció el propio Federico Coronel, empezaban a desmotivarse con las rutinas solitarias. «Por eso me preguntaron si podían entrenar conmigo. Fui a hablar por derecha, como tiene que ser, hasta tuve que firmar una declaración jurada. Consulté cuál era el protocolo, cómo íbamos a tener que hacer y en función de todo eso nos organizamos y arrancamos. Fue algo muy positivo«, dijo.
Cabe aclarar que estos entrenamientos nada tienen que ver con Sarmiento, que sigue sin entrenarse hasta que llegue la orden de AFA, sino más bien con el deseo de tres deportistas de poder ser guiadas en sus trabajos por un preparador físico de su confianza. «Sofi (D’Ambrosio), por ejemplo, antes de empezar en Sarmiento ya entrenaba conmigo. Después se le dio jugar en AFA y todo el boom que ya sabemos. La rompió«, explicó el profe. Y agregó: «Digo que es entrenamiento personalizado porque lo único que hacemos es corroborar qué es lo que hacen y estar yo ahí. No hubo bajada de Sarmiento de que se junten a entrenar. Salió de ellas, porque incluso desde la cabeza es algo muy favorable y necesario».
Desde que se integró al plantel de Primera División que compite en AFA, previo al inicio de una Zona Campeonato de la que por culpa de la pandemia solo pudo disputarse una jornada que, para colmo, quedará sin efecto, Federico Coronel fue visto por las jugadoras como un preparador físico que las exige al máximo. Lamentablemente, el parate provocó que mucha de esa ganancia física se perdiera, pero de igual manera el profe está muy conforme con los resultados obtenidos a lo largo de la cuarentena.
«El panorama es muy favorable. Uno plantea un tipo de semana de entrenamiento y apela a que ellas lo hagan. Después, lo pueden hacer como no. Porque en definitiva vos no sabés. Corre por la buena voluntad de las jugadoras», explicó. Y agregó: «En esta cuarentena implementé una Escala de Borg, que me permite conocer la percepción del entrenamiento de cada una de ellas. En función de esa percepción yo puedo determinar si la carga que aplicamos para un día fue baja, media o alta. De esa manera tengo un control a través de las unidades arbitrarias, que es lo que a ellas les costó día por día cada entrenamiento. Así cuantifico la semana y voy controlando las cargas de trabajo de manera semanal».
Más allá de del trabajo que pueda hacerse, el PF señaló que irremediablemente habrá una pérdida fisiológica en relación al estado de la plantilla cuando jugó su último partido ante Banfield. Y destacó que lo que se buscó y se sigue buscando es «jugar contra el tiempo, tratar que esa pérdida sea lo más lenta posible».
El último martes, por ejemplo, Coronel pasó a sus jugadoras un trabajo de consumo de oxígeno que consistió en hacer pasadas de 300 metros. Y dijo haber quedado muy conforme con los resultados que se le informaron. «Me sorprendí con el dato, porque pudieron entrar en el tiempo que les establecí y las que no pudieron estuvieron ahí. Lo charlaba con Sofí (D’Ambrosio), que es profe, y tengo otras profes en el plantel como Pini (Tamburini), Flor Gamarra, Lourdes Castro, Mari (Costa)… Es algo muy importante eso. La verdad que estoy conforme», señaló.
Precisamente con Sofía D’Ambrosio es con quien Federico Coronel ya había trabajado antes de su llegada a Sarmiento. Y al ver la evolución, física y futbolística, no puede hacer más que augurarle un gran futuro: «Es una bestia. Ella venía entrenando al pie del cañón porque tiene objetivos muy diferentes, muy importantes. Ella puede seguir trascendiendo. El tren le volvió a pasar. Le pasó dos veces en la vida, de chica pasó y no era el furor del fútbol femenino y ahora le vuelve a pasar con todo el auge. Por eso siempre le digo que tiene que darle con todo. Después el destino dirá, pero las condiciones las tiene», aseguró.
En relación a Sarmiento, Coronel señaló la importancia que tendrá apostar cada vez más a las categorías formativas, porque «las cualidades de fuerza, resistencia, velocidad se trabajan en el tiempo y no de un momento a otro». Además, opinó que la decisión de AFA de exigir la obligatoriedad de formar equipos de Reserva a los clubes que forman parte de la Primera División será clave para el desarrollo de la disciplina. «Las chicas que no te suman minutos lo van a poder hacer en Reserva. Entonces, ese proceso va a hacer que la jugadora entrene para jugar. Muy distinto es entrenar cuando vos sabés que el fin de semana son pocas las posibilidades de jugar. Eso va a ser un punto muy positivo», concluyó.
