Las últimas lluvias solo permitieron recuperar pocos centímetros en 500 hectáreas de la laguna de Gómez

Las lluvias del anterior fin de semana que generaron que en la laguna de Gómez cayeran ochenta milímetros generaron una pequeña recuperación del espejo de agua en 500 hectáreas, con pocos centímetros y «da una esperanza de que nuestra zona podamos empezar a recuperar si llueve en forma pareja de acá a mayo. Los meteorólogos indican que se necesitan más de 1.200 milímetros para recuperar en dos años la laguna y llegar al nivel del vertedero que es un metro más de agua en toda su extensión. Hoy estamos muy lejos de eso. Si no llueve se dará nuevamente el panorama que se tuvo hasta el viernes pasado», analizó el arquitecto Marcelo Balestrasse.

Entrevistado por el periodista Enzo Medina conductor del programa que se emite todas las mañanas en radio Rojas y forma parte del Nuevo Diario Rojense, el arquitecto Balestrasse dijo que «esto no es de este verano. Nuestras lagunas, mar Chiquita que alimenta en forma directa a Gómez, vienen bajando en estos tres años de Niña, con niveles de lluvias muy bajos en relación al promedio, en la zona núcleo. En estos tres últimos años apenas llegamos a mil milímetros. No solo Junín sino toda la cuenca como Ameghino, Villegas, Lincoln, Leandro N. Alem, sur de Santa Fe que alimenta nuestras lagunas a través de la Cañada de las Horquetas, Encadenadas, río Salado, se ven afectados por estos tres años de tan poca lluvias y una faltante hídrica muy grande ya hicieron que desde el año pasado se afectara la práctica náutica y el último año fue más duro».

Contó el edil de Juntos por el Cambio juninense y ex secretario de Planeamiento y Obras Públicas del Gobierno de Junín que «a lo largo del año se fue secando cada vez más. Ya se venía de un 2022 con una bajante pronunciado y este diciembre y enero nos encontró con una laguna seca en un 95%. Hay una zona denominada «Las tres aguas» con un 5% de agua pero son centímetros».

En el caso de la Laguna El Carpincho tiene agua porque tiene menos extensión y además recibe el agua de desagues pluviales de Junín.

Balestrasse contó en la entrevista con radio Rojas que hay registros de 1947 a 1951 con sequía pero siempre con agua en el medio de la laguna, se repite en 1963, en 1985 a 1986 y 2019, pero nunca con esta magnitud que se dio en esta oportunidad o por lo menos no hay registro en los últimos 70 u 80 años.

El arquitecto recorrió la cuenca junto al presidente del Concejo Deliberante de Junín, Juan Fiorini, y señaló que «si bien se ha comentado de terraplenes y obstrucciones, no hemos notado ningún terraplen. También hubo noticias de que un terraplen no dejaba llegar agua de uno de los sectores aportantes y por eso pedimos informes al gobierno de la provincia de Buenos Aires».

En cuanto a la fauna contó que hasta diciembre había Flamencos, y más de 20 o 30 especies de aves que ya no estan. «Necesitan poca agua pero no una sequía y ni hablar de las especies de pejerreyes como también algunos bagres. tenemos una estación hidrobiológica de cría de pajerreyes, con alevinos en piletones que serán sembrados en Gómez una vez que retorne el agua», destacó el concejal juninense de Juntos por el Cambio en la entrevista radial con el periodista Enzo Medina.

Balestrasse también aconsejó que la gente, en caso de circular con motos o camionetas, lo hagan por la orilla para evitar que se encajen.

«Los meteorológos dicen que si las lluvias acompañan la laguna se puede recuperar pero otros dicen que el año pr´pximo podría repetirse La Niña, esperemos que no para recuperar el esplendor de la laguna que tuvo siempre. Esta sequía nos ha permitido construir un espigón nnuevo más ancho y más alto que permitan salvar inundaciones históricas, con la misma longitud de 150 metros», detalló Balestrasse en la entrevista con radio Rojas.

Además esta sequía se aprovechó para limpiar de piedras y escombros como también de esqueletos de pescado tras la mortandad de peces provocadas por fenómenos climáticos.