El menor había llegado con su bicicleta a un kiosco ubicado en inmediaciones de las calles Rioja y Azcuénaga cuando apenas eran las 19 horas.Prolijamente la dejó en el bicicletero ubicado a las puertas del comercio, e ingresó.
Cuando minutos después salió, la bicicleta playera rodado 26 color violeta, con calcomanías y cubre rayos blancos, había desaparecido.Lo que no imaginó el ladrón, que vestía pantalón oscuro, campera roja y un buzo azul en los hombros, que una cámara de seguridad registró todos sus movimientos.
Inclusive cuando sube a la bicicleta y se va pedaleando.La denuncia fue radicada en dependencia policial y no será difícil identificar al autor de la sustracción.La causa, por hurto, recayó en la fiscalía de turno a cargo de la Dra. Vanina Lisazo.