Forzaron una abertura, ingresaron en un Estudio Contable, “trabajaron” durante dos horas y se apoderaron del dinero que había en una caja de seguridad
Llegaron a robar con una amoladora
Forzaron una abertura, ingresaron en un Estudio Contable, “trabajaron” durante dos horas y se apoderaron del dinero que había en una caja de seguridad. Para alcanzar el objetivo, llevaron hasta una moladora. Todo sucedió en una zona muy transitada y que además cuenta con muchas cámaras de seguridad-tanto privadas como públicas-, por lo que se presume, no sería difícil identificar a los autores.
Esta vez fue entre los primeros minutos de la noche del martes y las primeras horas de la madrugada de hoy.
Seguramente los delincuentes ingresaron a un Estudio Contable aprovechando que por ser día no laborable, recién detectarían el robo mañana con el inicio de la jornada.
Se presume que el accionar de los desconocidos comenzó en los primeros minutos de hoy, en un inmueble ubicado sobre Avda. San Martín a metros de su intersección con Bernardo de Irigoyen, en una planta alta.
Los desconocidos habrían permanecido en el lugar al menos dos horas tras ingresar luego de forzar una puerta de la parte trasera de la edificación.
A las 2 de la madrugada, el profesional recibe el llamado telefónico de un vecino –ese no es su domicilio particular- informándole que se había disparado la alarma.
Al considerar que podrían haber accedido al Estudio, se traslada hacia Avda. San Martín para encontrarse con las oficinas literalmente dadas vuelta y que le habían llevado una importante cantidad de dinero.
Si bien no pudo ser confirmado, algunas versiones señalan que la permanencia de los delincuentes durante tanto tiempo tuvo que ver con que trabajaron con una amoladora para abrir – ¿o llevarse?- una caja de seguridad.
Todo indicaría que alcanzado el cometido en el Estudio, trataron de acceder a una empresa ubicada en la planta baja y aunque forzaron una abertura, no pudieron entrar porque comenzó a sonar la alarma, por lo que se dieron a la fuga.
Con la llegada de personal policial tras el aviso efectuado por la víctima, se inició una nueva etapa, la de la investigación tendiente a esclarecer el ilícito.
Se analizan cámaras de seguridad tanto privadas como públicas.
Teniendo en cuenta que es un sector de la ciudad muy monitoreado, no sería complicado determinar en qué se movilizaban los delincuentes y cómo accedieron al edificio.
Por lo pronto se habría determinado que la maniobra delictiva comenzó pasadas las 23:30.
La causa recayó en la Fiscalía de turno a cargo del Dr. Martín Laius.